DESDE LAS FUENTES
DANZARINAS
En análisis político, es fundamental la elección del modelo comparativo
que se va a utilizar para buscar los patrones de conducta de los gobernantes y
gobernados. Esto nos facilita comprender lo que sucede y reflexionar sobre el
eventual futuro.
Esto es uno de los modelos más conocidos que propone Nicolás
Maquiavelo en su obra “El Príncipe”, mismo que en sus detalles
estructurales ha pasado de moda, ya que fue escrito para una realidad social
totalmente diferente al México y Campeche del siglo XXI; sin embargo, como
muchos pensamos sobre nuestra entidad en tiempo presente, hemos establecido la
teoría de que México se feudalizó durante los 12 años de gobierno panista.
Debemos analizar los estados como pequeños principados con una especie
de gran protectorado y catalizador general que es el gobierno federal, algo así
como el papel del papado en los años de César Borgia.
En una historia de todos los tiempos Montesquieu examina los
principios éticos de los gobiernos, estudia las necesidades físicas y morales
de sus pueblos y encuentra el origen de las leyes que los gobiernan. En el
pensamiento del abogado Secondat, el Legislativo dispone, con las
leyes, la manera de vivir; el Ejecutivo, con la fuerza, la pone en práctica, y
el Judicial vigila que ni éste ni aquél se extravíen en el ejercicio de sus
atribuciones. Montesquieu
confió los jueces, a los magistrados, la misión de defender al
pueblo de los excesos de sus gobernantes.
Dos siglos después de la muerte del barón, otro abogado francés, Alexis Henry
Charles, conde de Tocqueville,
también ilustre especialista en la investigación y análisis del oficio de
gobernar, con palabras proféticas subrayó el respeto insustituible que merece
el Poder Judicial.
“Es el Poder que está colocado a mayor altura que ningún otro tribunal
conocido. En las manos de los magistrados reposan incesantemente la paz, la
prosperidad. Sin ellos la Constitución sería obra muerta. A ellos se acude para
impedir las usurpaciones, para defender el público interés contra el privado,
el espíritu de conservación contra la inestabilidad democrática”.
“Su poder es inmenso, pero es un poder de opinión. Son todo poderosos en
tanto que el pueblo consiente en obedecer la ley. No puede nada cuando la
desprecia, y el poder de opinión es muy difícil de manejar, porque no se sabe
cuáles son sus límites. Es peligroso traspasarlos”.
Palabras proféticas. En el siglo siguiente traspasaron esos límites el
comunismo, el nacismo, el fascismo. Recordemos las arengas de Mussolini
a las camisas negras en la Piazza Venecia de Roma; la historia de Hitler
ante las camisas pardas aglomeradas ante el Reichstag. Esto recordó esta
columna cuando vemos a priistas, panistas y perredistas con los puños en alto,
y a las huestes de Luis Antonio Che Cu en su sublevación contra
el Poder Judicial, el Ayuntamiento de Campeche y las leyes que violan cada día
que pasa entre el desdén de la masa por la ley.
Cabe aclarar que el problema del ambulantaje o semifijo, como guste
llamarle usted, en el Centro Histórico no es nuevo, parece que fue ayer cuando
se implementó el Programa denominado “Un Centro Histórico para disfrutar”
durante el trienio de Fernando Ortega Bernés, en su paso por el
cuartel Pedro Baranda, programa innovador que en su momento buscó regularizar a
los cerca de 18 comerciantes ambulantes establecidos en esa delicada área
mediante la aplicación de un programa de estricto de “vigilancia e inspección
en el Centro Histórico”, a través del cual, en coordinación con el INAH se
mejoró la imagen urbana y conservó primordialmente el nombramiento
de Patrimonio Cultural de la Humanidad otorgado por la Unesco. Pero nada de
esto fue fácil, se establecieron parámetros inflexibles como lo fueron el
adecuar los mobiliarios y la vestimenta de estos comerciantes a las condiciones
coloniales establecidas previamente.
Hoy todo es historia y lo es precisamente porque todo en esta vida tiene
un ciclo, para ello bastó y sobró que Beatriz Selem Trueba llegara de alcaldesa para
echarlo a la basura y renombrarlo bajo “Una tradición siempre viva”, que como
todas las cosas en su fugaz paso por la alcaldía, muy a nuestro pesar, en
Sesión Extraordinaria del H. Cabildo lo canceló y con ello originó que los
problemas subsistan sin dejar elementos para que la presente administración
municipal encuentre una solución adecuada.
Por todo ello, resulta extraño que ningún comerciante de los que se
dicen ser fieles seguidores de este pseudolíder, conozcan siquiera una sola
propuesta de las que le han hecho llegar las actuales autoridades municipales,
valdría la pena replantearse si las reuniones que continúan sosteniendo sean de
provecho. Algo debe quedar claro en este asunto, nadie puede estar por encima
de la Ley.
Precisamente por ello, valdría la pena analizar qué límites van a
traspasar en este desacato al que se incorporan con declaraciones en las que se
adhieren sin reserva al comportamiento de este liderzuelo, al que como señale
anteriormente le han propuesto cinco opciones y ninguna satisface su ego,
dejando con ello en letra muerta la ley en el Estado de Campeche.
Cuando el populacho no aprecia a la ley, o permite con su silencio, que
una minoría imponga su desprecio, sobre las ruinas de la Constitución se
asienta el imperio de la fuerza. Así se ve el desacato de Che Cu desde el balcón de la
historia, como un retorno a los excesos y las declaraciones del absolutismo.
Terminamos este pequeño comentario de evocación de Montesquieu con las divisas que
asignaba a las formas de gobierno: “La monarquía está basada en el honor; la
república, en la virtud; el despotismo, en el miedo”.
En el fondo de este teatro del absurdo de Luis Antonio hay un temblor de
miedo. El miedo que es la cruz que lleva a cuestas Campeche en el deslinde un
sesquicentenario de emancipación política. ¿Caminamos hacia Versalles o hacia
Campeche?
MENTIROSO, MENTIROSO
Una vez más, Everardo Aceves Navarro, cariñosamente
conocido en esta columna como “El abuelo Febo”, insiste con su conducta
mentirosa sobre la producción de maíz y sus “records” alcanzados desde el año
2010 en que quedó a cargo de esa dependencia que, ha tenido la mala suerte de
estar a cargo de sinvergüenzas.
En esta ocasión las cifras que maneja de nuevo han hecho creer a sus
interlocutores que estarán avaladas por el INIFAP, quien dará las cifras
finales de la producción de 2012, resultado de “sesudos” estudios de gabinete
basados en muestreos y luego traducidos a porcentajes estimados ---por supuesto
inflados---, que generalizan como las hectáreas produjeran parejo, uniforme,
similar, etc., tonelaje soñando en una “jauja agrícola”-
Recordemos que un gran mentiroso tiene principio y fin. Podrá engañar a
unos cuantos toda la vida, a otros más por un tiempo; pero nunca podrá engañar
a todos, toda la vida. En este caso a él le basta con que la buena intención
del Gobernador del Estado sea el interlocutor válido para que con su venia y a
través de los medios de comunicación lance su aviso urbi
et orbi de que la próxima cosecha será de antología.
Productores avanzados, profesionales del ramo y campesinos inteligentes
(que por supuesto los hay), conocen perfectamente que la Secretaría de
Desarrollo Rural (SDR), es una cueva de ladrones donde el que no cojea de una
pata lo hace de la otra. Esos “investigadores” tienen una especie de cofradía
para protegerse unos a otros, amarrada a través de compartir presupuestos
gubernamentales que “ejercen” para sus sesudas investigaciones que producen
resultados “a modo” para poder seguir drenando recursos per
se.
Para nadie es un secreto que los Menonitas, esa raza aria de origen
alemán-holandés y asentada en los municipios maiceros del Estado como son
Hopelchén y Hecelchakán, son los verdaderos artífices de los aumentos
significativos en la producción de maíz. Con esfuerzo propio y con mínimo apoyo
oficial, ya que éstos son canalizados a pequeños productores que si bien
obtienen rendimientos, estos son poco significativos en el volumen total de la
producción estatal.
Estamos hablando de un 10 o 12 por ciento, pero en las cifras que Aceves Navarro
menciona los apoyos a ese sector se han reducido de cinco a tres sacos de
semilla y de ocho a cinco sacos de fertilizante (y eso no lo menciona). ¿Así
espera seguir cacareando records? ¿con menos a más?
El fondo de la olla de estos apoyos es el reparto de vales para obtenerlos,
que son como los cheques al portador que muchos productores venden y que
proveedores y funcionarios operan, ya que involucran montos considerables que
difícilmente puede comprobarse su aplicación en campo, pero si en facturas
cobrables.
Ahora bien ¿dónde entra en esta obra de teatro el flamante coordinador Jorge Salomón
Azar García, quien se suponía sería el fiel de la balanza que
pondría los números en la producción agrícola, merced a ser un profesional del
agro, además de un ex gobernador del Estado?
Fue entonces una farsa aquel manotazo de Azar García en la mesa cuando se
discutían asuntos relacionados con el campo y que los presentes interpretaron
como dirigidos a “El Febo. Porque en los hechos tal parece que son valores
entendidos y volveremos a ver cifras de más de 600 mil toneladas de producción
de maíz, que es un auténtico sueño guajiro, porque el número de hectáreas
abiertas a la producción, como ya he explicado en anteriores comentarios no dan
más allá de las 300 mil toneladas. Imagínense entonces el tamaño de la mentira
de don Everardo.
¿Hasta cuándo le van a hablar con la verdad al Gobernador del Estado?
Recuerden ---todos los involucrados--- que nada más les quedan dos cosechas
pendientes y luego pueden convertirse en perseguidos de la justicia si se
prueba que no solo se inflaron los números de producción, sino se desviaron
recursos y todo lo que esto trae aparejado.
Nadie fuera de Campeche cree esta mentira porque la
oferta de maíz no es tal ya que apenas alcanza para el consumo de la entidad.
Que se informen bien lo que hacen los grandes productores nacionales cuando sus
cosechas son buenas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario