domingo, 26 de septiembre de 2010

“YO TUVE UN SUEÑO”

Estoy triste. La historia me está demostrando que no fue todo como lo soñé, planee y traté de realizar.

Hace muchos años, una familia de libaneses, bajo cuya égida nos levantamos, llegó a estas tierras y se convirtieron en faros de esperanza para decenas de sus descendientes, que supimos y vivimos injusticias. Pero llegó el amanecer para terminar una larga noche de penurias.

Estos abuelos tuvieron que cambiarse hasta el apellido porque de otra forma no podían trabajar, ya que eran inmigrantes como lo son hoy los mexicanos que se van a Estados Unidos de Norteamérica en busca también de un sueño.

Pero casi 100 años después debemos de considerar que algo nos salió mal. La vida de los árabes es todavía minada por los avatares de los nacidos en esta tierra. Para ello la tercera generación nos hicimos el propósito de romper esos grilletes políticos y dejar esa isla de pobreza mediante la prosperidad material.

Cien años después esta tierra casi la conquistamos como Saladino hizo con Jerusalén, para comenzar a cobrar los cheques de la justicia, luego de languidecer nuestros ancestros en empleos mal remunerados y viviendo en los rincones de esta sociedad campechana que no permite a nadie que no sea de su alcurnia ascender a niveles políticos, económicos y culturales.

Mi hermano y yo, con los mismos ideales, llegamos a la conclusión de que era el momento de lograr algo por nosotros mismos. Con penurias nos introducimos en política. En esas arenas movedizas de las que sólo salen quienes son capaces de todo.

Sin embargo, me quedó claro que para saciar nuestra sed de progreso, tendríamos que beber la copa de la amargura durante el ascenso a elevados planos de la política; a avanzar pese a la resistencia a la fuerza física con la fuerza del alma. Pero no podíamos caminar solos. En el devenir de mi sueño tuve que comprender que mi destino está ligado inexorablemente a las relaciones de familia y que a medida que caminaba había que pensar siempre hacia el frente. Nunca volverse atrás, cayera quién cayera en el camino, porque todo lo que se oponía eran estorbos.

Yo tengo un sueño que un día incluso, el aletargado pueblo de Campeche, un lugar sofocado por el calor del tiempo y las conveniencias, fuera transformado en un oasis de prosperidad a nuestra manera.

Yo tengo un sueño que un día, acá en nuestra tierra adoptiva, con campechanos despiadados, con un gobernador cuyos labios lo llevaron al lugar donde se encuentra, sea capaz de reconocer lo importante que mi hermano y yo hemos hecho por Campeche.

Cuando este sueño ocurra, cuando dejen de atacarnos nuestros enemigos; cuando dejen de pensar y sumar lo que nuestra familia ha logrado en bienes materiales; cuando sean capaces de dejar de ponernos piedras en el camino, por fin habremos logrado el sueño de los Saad.

Pero, ¡hoy sigo soñando!

Sueño, que algún día volverá la Grandeza que mi hermano trató de implantar, cuando tuvo a su cargo el gobierno del Estado.

Sueño, que hoy no estoy acabado pese a que me acerco a pasos agigantados a la tercera edad. Edad triste porque todos mis pellejos apuntan al centro de la tierra.

Sueño, que buscaré nuevos socios para emprender nuevos proyectos, porque ya vi que los españoles que traje en el pasado gobierno, en que casi controlé al 100 por ciento, no sirvieron porque su mentalidad conformista, impactada por el Principio de Peter y por ratas, impidió que mis recursos invertidos en el desarrollo turístico, fructificaran para culminar ese proyecto.

Sueño, que vuelvan aquellos tiempos en que tuve cargos de primerísimo nivel en las administraciones de la Concordia, la Grandeza y de Hechos.

Sueño, que nunca más despierte con la pesadilla que Guadalupe de la Candelaria Beltrán, en marcha con sus colonos me hayan “quemado”, al pedirme a voz en cuello a las puertas del ex cuartel Pedro Baranda, nuevas instrucciones para tomar el CDE del PRI, ya que el caso de la gubernatura estaba decidido a favor del amigo de Luis Donaldo Colosio.

Sueño, que vuelvan los días en que mis socios y prestanombres hacíamos y deshacíamos con las licitaciones para construir con materiales de baja calidad millares de viviendas y obras para los campechanos.

Sueño, que se sepa que el verdadero actor intelectual del bello malecón de esta ciudad, no fue mi hermano sino yo. Y que por el contrario nunca se sepa que incluso el programa de rescate de fachadas que urdimos “el loco de las tarolas” y yo, en aquella oficina de Patrimonio Cultural no fue de ninguno de los dos sino de mi cuñado el de Icomos.

Sueño, que por más que el cuñado de “mala suerte” solicite y solicite por medio de transparencia quienes fueron los constructores de las naves de las maquiladoras en la época de mi hermano, esto nunca se sepa. Aunque mi pariente el dentista parece que algo le pasa.

Sueño, que a los españoles se les prenda el foco y dejen de enredar el asunto de Esmeralda Resort, porque por sus pillerías, y como dice el eslogan del Gobierno Federal por “Vivir Mejor” este buque encalló y con él mis recursos y los que obligué al “ratón Crispín” a entregar fuerte monto del erario estatal.

Sueño, que Satanás (no el de Salud) se lleve al fondo del averno a todos los socios de ICA, que amenazan muy seriamente con quedarse con mis ahorros y los de varios más de mis prestanombres.

Sueño, que maldita sea la hora en que mis parientes políticos me rogaron apoyo para ser acomodados en cargos de primer nivel en todo el docenato maravilloso. Tal es el caso del malagradecido “beché” que corrió de su oficina a un enviado mío que usó su computadora oficial para sacar datos del juicio ICA-MALL. Mal rayo lo parta a ese enano que me apuñaló por la espalda. Lo positivo es que le recordé por teléfono a la autora de sus días. Y aunque luego por miedo recapacitó y dio declaraciones que siguen enredando el caso, lo cierto es que ya lo tengo marcado y no creo que tenga los hígados de pedir auxilio al número uno.

Sueño, que así como hay traidores como el anterior, hay también leales. Tales son los casos de “La yanga”, de “la rata”, del “cabezón”, del “pámpano”, del padre del hijo del “Padre Amaro” y de otros más que no quiero dar sus datos, pues son mis orejas en el nuevo gobierno.

Sueño, que ya no veo las horas de salirme del infierno de ser un ave de curul de segunda que me tiene maniatado, aunque me proporciona un fuero que no se si más adelante lo necesitaré (“Cría fueros y se te meterán a los ojos”, Tony dixit).

Sueño, que si pudiera daría marcha atrás y no volvería a Canadá a solicitar a Scotiabank de ese país, un crédito fuerte para apalancar financieramente el proyecto turístico de Champotón.

Sueño, que nada me gustaría más que el eterno político legislador de un mal paso bajando las escaleras del platillo volador y quede en silla de ruedas por el resto de sus días. De esa forma quedaría en el sitio que mi categoría merece.

Sueño, que aquellas malditas encuestas que me dejaron más indefenso que Calderón ante el narco, y que fueron causa y efecto de poder lograr mi sueño político como sucesor del “ratón Crispín”. Malvados los de Telesur que me truncaron la oportunidad que nos daría al grupo de hacernos del poder con cerca de 25 años (seis de la Concordia, seis de la Grandeza, seis de Crispín y seis míos).

Sueño, que me arrepiento de no haberme hecho panista en su momento, porque me iría mejor políticamente que con los rojos que son verdaderos perros del hortelano.

Cuando mis delirios oníricos cristalicen, la entidad será un lugar donde indios, árabes, judíos, negros, españoles y lo que caiga en los próximos años, podremos repicar en unas campanas como la instalada en la Biblioteca, que los Once Campeches han arribado al fin a la prosperidad.

PIAN PIANITO

El Diario El Universal, uno de los tres más grandes de México, dio a conocer la semana que nos antecede una encuesta nacional , sondeo de opinión o escrutinio ciudadano, realizada en las 32 entidades del país. La mayoría de los consultados da muy bajas calificaciones a sus gobernantes y refiere que su situación económica ha empeorado respecto al año pasado.

La población en general aprueba totalmente en un 55 por ciento y desaprueba en un 40 por ciento. A continuación las preguntas:

1.- Usted ¿aprueba totalmente, aprueba o desaprueba totalmente la forma en que se desempeña su gobernador Fernando Eutimio Ortega Bernés?

En Campeche el 86 por ciento aprobó y solamente un 12 por ciento desaprobó. Obtuvo así Ortega Bernés el primer lugar nacional en el Escrutinio Ciudadano con cuatro puntos porcentuales sobre Humberto Moreira Valdez de Coahuila, que obtuvo 82 por ciento (82%-17%).

2.- ¿Cuál diría usted que es el principal problema que enfrenta su Estado en estos momentos?

En Campeche se opinó que: La inseguridad con el 19%, el desempleo con el 31%, la violencia con el 1% y las inundaciones con el 20%.

En el caso de Felipe Calderón Hinojosa, en Campeche se le dio la calificación del 74%, solamente superada por Yucatán con 84%, Tamaulipas con 80%, Nuevo León con 75% y empatado con Campeche, el estado de Veracruz con 74%-

En una escala del 1 al 10 donde 1 es muy mala y 10 muy buena ¿qué calificación le daría a Fernando Eutimio Ortega Bernés, por su trabajo como gobernador. En este punto el campechano obtuvo el segundo lugar nacional con 7.8 y Humberto Moreira obtuvo el primer lugar con 8.3.

3.- ¿Cuál cree que es el principal error del gobernador Fernando Eutimio Ortega Bernés?

No combate la inseguridad 3%, No sabe gobernar 4%, Ninguno 29%, Corrupción 8% y Falta de apoyo a la gente 2%.

4.- ¿Cuál cree que es el principal logro del gobernador?

Ninguno 5%, carreteras 2%, Obras Públicas 5%, Programas sociales 8% y Educación 30%.

5.- ¿Cuál es la situación económica en comparación con la de hace un año: mucho mejor, mejor, peor o mucho peor?

45% mucho mejor y 52% peor o mucho peor.

En simpatía partidista: Independiente 56%, Priista 29%, Panista 13% y Perredista 1%.

Campeche, Coahuila, Hidalgo y Querétaro recibieron los mejores niveles de aprobación entre sus habitantes, arriba del 80% en una encuesta realizada por El Universal en las 32 entidades federativas.

Esto pone un mentís a quienes han afirmado que no hay rumbo ni mando en Campeche.

SEGUNDO TERCIO DE BANDERILLAS A UN TORO MATRERO

A raíz de la publicación de las aventuras del abuelo Febo, he recibido algunas llamadas para festinar el primer tercio de varas introducidas con arte a ese viejo burel, deseando que persista la faena para llegar al último tercio. De esa forma el matador que mora en las alturas pueda pasarlo a capote con manoletinas y llevarlo a espada clavada en lo más profundo del morrillo, si nos dejan.

Se habla del gris papel que Febo representó cuando fue delegado de la extinta SARH (ahora SAGARPA), donde conoció a Jorge Salomón Azar García, cuando este era gobernador y que las apologías eran norma del funcionario federal, al grado de que cuando terminó su encargo en Campeche, después de hacerse de dinero y en forma obscura y casi regalada de una propiedad irregular –que tuvo que pagar de nuevo después de un proceso judicial- la que más tarde convertiría en un rancho para la cría de borregos y construiría la mansión rural en la que vive (km. 14 de la carretera Chiná-Pocyaxum), fue nombrado director general de la PRONASE (Productora Nacional de Semillas) dependencia federal descentralizada de la hoy SAGARPA que desapareció siendo el titular.

De allí pasó a ser director general de unidades de riego de la misma secretaría hasta jubilarse en el ISSSTE con el máximo nivel, e incorporarse al COLPOS –dependiente de la universidad de Chapingo de donde es egresado- para que a través de un amigo, el doctor Figueroa, regresa a Campeche y funda el Campus del COLPOS para dedicarse a la “investigación” y a su ranchito.

Desde esa trinchera, en la que disponía de recursos federales, a veces estatales y aprovechando sus relaciones, comenzó a desarrollar su rancho borreguero –que hoy por hoy es el mejor del Estado- utilizando recursos de cuanto programa pudiera, hasta conseguir tener la mejor calidad genética y de técnicas de explotación, ya que actualmente es proveedor de sementales ovinos a los programas y directamente a los interesados en forma particular, así como vientres y de engorda que vende principalmente al centro del país, y continúa –por supuesto- beneficiándose de los programas a través de su hijo que funge como dueño.

Su tan cacareado programa de asistencia técnica y capacitación, está al borde del fracaso ya que de 140 técnicos contratados inicialmente, sólo continúan cerca de 50, pues se dieron cuenta que la información que estaban obteniendo iba o es proporcionada al vástago de Febo, para que la utilice en el desarrollo del “doctorado” que actualmente cursa en Barcelona, España, y que además le suspendieron los pagos mensuales pactados por sus servicios profesionales, ingresos que utilizaba para realizar los trabajos encomendados en el medio rural, condicionándolos a recibir el pago total al final del programa, así como asistir a los cursos de capacitación (presupuestados en casi tres millones de pesos), a cargo de la empresa familiar del doctor Figueroa y sus dos hijos (cuate que lo metió al COLPOS), razón de la deserción de la mayoría.

Esto nos da una lectura de ¿qué van a hacer con el dinero que les sobrará al haber menos técnicos en el programa? ¿de qué forma van a justificar el recorte del programa? Estas son al parecer genialidades de un tal Natividad, ¿o es plan con maña?

Algunas personas dicen que JSAG fue uno de los que lo recomendó para la Secretaría de Desarrollo Rural, pero se sabe que actualmente tiene serias diferencias con Benjamín Azar García, actual delegado de la SAGARPA, por problemas en el cumplimiento de la normatividad de la operación de los programas federalizados que llevan conjuntamente –mucho tiene que ver el COLPOS en eso- al grado de que se piensa que los comentarios vertidos a la SDR, vienen de allí, de El Sur, nada que ver.

Hay que recordar también que en fechas pasadas no muy lejanas, declararon Febo y COL, casi con fanfarrias que el veto de los estadounidenses al ganado de Campeche, sería pronto resuelto, cosa que no es cierta, pues es un proceso que dura varios años (entre 5 y 6), por lo que están engañando al número uno, ya que ahora hablan de 75 o 100 millones de pesos para resolverlo. ¿De dónde los van a sacar y cuánto pensarán desviar a su favor?

El problema de Palizada tiene vertientes sociales y económicas ya que para eliminar el ganado tuberculoso del municipio, aunque lo repongan de inmediato, acabarían la estructura productiva de los ranchos que viven de la producción de leche y becerros para venta y sumado a esto el problema d la venta de los animales (40 mil cuando menos) que dan positivos a TB (tuberculosis bovina) ¿en dónde y en cuánto tiempo? Llevarían a la quiebra a los ganaderos de Palizada.

Esto nos da una lectura de que sus estrategias son ingenuas e inoperantes, o que son muy pentontos o muy vivos, ya que no han entendido la dimensión del problema y hablan de sogas en casa del ahorcado.

El gremio ganadero ha sido beneficiado con programas y recursos, prácticamente desde los tiempos de Jorge Salomón Azar García, pero de poco ha servido, los avances en la producción y en el crecimiento del hato han sido poco significativos, como también su genética, ya que la gran mayoría todavía practica la ganadería extensiva y las producción primaria, sin valor agregado. Becerros y leche, sólo pastoreo y los menos engorda de novillos y elaboración de lácteos.

Lo cierto es que hay que hacer algo y pronto. Utilizar a profesionales más capaces con una planeación razonable y visión de metas a alcanzar a corto, mediano y largo plazo con evaluación permanente para corregir con firmeza en el andar de acuerdo a lo que se vaya avanzando, adaptándose a los factores socioeconómicos reales del mercado para poder competir con éxito. Lo demás son vaciladas y corrupción disfrazada. ¿Habrá entendido todo lo anterior también Carlos Ortiz Lanz?

SIMULTANEAS

Me llamó mucho la atención que con motivo del 25 aniversario del terremoto en el D.F., volviera a ver una fotografía del Hotel Regis. En ese lugar estuvo hospedado mi amigo Eudaldo Espinosa Alvarez, y que gracias a un reventón que corrió la noche previa al sismo le salvaron la vida. Lalo regresó pasadas las ocho de la mañana y se encontró con que su hotel estaba como los sandwichs que se ponen en una waflera. Suertudo el tipo…Dicen que la vida todo cobra y nada olvida y eso precisamente parece estarle ocurriendo a quién en el pasado reciente vivió como tocado por la divina Providencia, pero le llegó la hora de pagar facturas y todo parece indicar que se va a investigar a fondo. Es el caso del verdadero poseedor de la mayoría de las acciones del Hotel Ocean View…El delito que cometió José Lombardía, comisario del proyecto Esmeralda Resort, al allanar violentamente la oficina de Humberto Miguel Valdez Hernández, director del Registro Público de la Propiedad y del Comercio, dependiente del Gobierno del Estado y operar la computadora de este funcionario, presuntamente sin su permiso, lo hace acreedor a delitos configurados en el Código Penal del Estado de Campeche en sus artículos 169 y 170 con relación al 1º del citado Código, no obstante, se persigue de oficio y si el titular no levantó querella puede ser reconvenido y removido por hacerse cómplice del infractor.

domingo, 19 de septiembre de 2010

CENIZAS DEL ESPLENDOR

A escasos años de la desaparición física de los viejos líderes de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), en el inicio de la segunda década de este siglo ya nadie recuerda el poder que un día tuvo esta central obrera. En Campeche, y si bien es cierto, nunca hubo centros de trabajo, industrias o centros fabriles que agruparan números elevados de trabajadores, si crecieron al margen de esta importancia dirigentes, que no líderes en el sentido estricto del término.

Los movimientos obreros de los últimos años y en especial de los trabajadores de empresas se han visto sin sustento. Los viejos dirigentes como Francisco Piña Campos, de los taxistas; Francisco Puga Ramayo, de los obreros; Francisco Solís Rodríguez, de los trabajadores de la industria del camarón, etcétera, siempre estuvieron bajo la batuta del desparecido “lobito” Fidel Velázquez, quien dirigió durante tres decenios el Congreso del Trabajo y simultáneamente la CTM, a su muerte dejaron en la orfandad a millones de trabajadores que el viejo Fidel presumía controlar totalmente cada seis años al candidato a la Presidencia de la República y que le dieron patente de Corzo para tener cada tres años suficientes curules y cada seis años un buen número de escaños, amén de que por esa rara virtud del viejo Partido Revolucionario Institucional (PRI), se adjudicó varias gubernaturas, como fue en el caso de Campeche (Dr. Alberto Trueba Urbina y Abelardo Carrillo Zavala).

La realidad es que la derrota del PRI en el año 2000 fue el fin a secas no sólo de la CTM, sino también de la Confederación Nacional Campesina (CNC), esa que hoy trata de resucitar en esta entidad con respiración de boca a boca de la ex alcaldesa Sonia Jacqueline Cuevas Kantún, también por supuesto de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP) y algo perdida en ideología como la Central Campesina Independiente (CCI). Todas ellas son cenizas del viejo esplendor del partido en el poder hasta que el panismo tomó las riendas del poder y si no las desapareció si las dejó en un estado de orfandad que causa lástima.

Conforme a una anacrónica legislación laboral, los sindicatos y sus centrales no nacen por la voluntad de sus afiliados que en el caso de Campeche es muy poca, ni basta que los dirigentes sean elegidos por los representados, como ocurre en todo régimen de libertad sindical, sino que esos hechos sólo se convierten en actos jurídicos valederos cuando la autoridad los avala, concede el registro en el caso de agrupaciones nacientes o “toma nota” de las decisiones concernientes a los mandos sindicales.

Para nadie es un secreto que las agrupaciones señaladas, pese a seguir en el poder el Revolucionario Institucional, son solamente un membrete y como las solteronas viejas, el maquillaje se les cae a pedazos. Todas ellas buscan mejores tiempos y se encuentran reagrupándose para el 2012, pero mientras tanto están en terapia intensiva. Muertos Velázquez Sánchez, Leonardo Rodríguez Alcaine y estar de facto sin un liderazgo, pese al ferrocarrilero Víctor Flores Morales, el centro de decisiones del Congreso del Trabajo está vacío.

El verdadero origen de la crisis del Congreso del Trabajo, papá grande de los cetemistas campechanos y otras organizaciones, es que sus agrupaciones, no siempre marcadas por la autenticidad, han envejecido tanto como sus líderes y han perdido la representatividad que un día tuvieron al amparo del viejo Fidel. Atrás quedaron por ejemplo Fernando Solís Patrón (mi recordado amigo “chanquilón”), José Dolores García Aguilar, Carlos Garma Pérez, Alberto Pérez Piña, Rubén Uribe Avilés, Pedro Darío López Vargas, Edilberto Vázquez Ríos, Julia Ureña Chan y el sempiterno Francisco Hass Palomo.

No sólo el paso del tiempo las ha lastimado, sino también la modificación de las estructuras económica y políticas del país. El desmantelamiento de la escasa planta industrial (léase Industria Embotelladora de Campeche) provocado por el centralismo yucateco de la familia Ponce, las fraudulentos acuerdos entre el gobierno de la Grandeza con las maquiladoras y la permisividad de que empresas desarrolladoras turísticas hayan contratado obreros sin la venia de esa central obrera, además de que achicaron la actividad productiva y repercutió en el marasmo en que se encuentran los sindicatos afiliados.

El papel de estos sindicatos, en las actuales condiciones, se ha reducido, en el mejor de los casos, a la defensa de cuando en cuando del empleo y esa disminución de su protagonismo social se ha traducido en la pérdida de su influencia política. Las transformaciones internas del PRI dejaron a sus líderes sin las posiciones fijas en las cámaras legislativas (locales y federales) que durante años llevaron a los Carrillo Zavala a ser hacha, calabaza y miel de las postulaciones y que caracterizaron esa relación entre el obrerismo oficial, el gobierno del estado y su partido.

Llama la atención que la semana que nos antecede el ex gobernador cetemista realizó un convivio con sus colaboradores de ese entonces, hecho que se sucedió hace cinco lustros, cuatro décadas y media o sencillamente un cuarto de siglo. En el mismo, señaló el viejo cetemista que se encontraba parte de su gabinete legal y el ampliado, y por supuesto, estaba también como invitado especial Fernando Eutimio Ortega Bernés, gobernador del Estado y que trabajó en ese sexenio en un cargo administrativo.

Esperamos que no cunda el ejemplo. Porque tanto Carlos Pérez Cámara como Rafael Rodríguez Barrera, ambos gobernadores (el primero en interinato de seis meses) y con vida, podrían organizar actos similares por 37 años de aniversario de haber despachado en ese cuarto piso. Pero no, son personas con cordura y ya sin tintes de lucimiento. Comprenden que sus tiempos forman parte de una página de la historia política de Campeche que todavía está siendo valorada en su justa dimensión.

Por otra parte ¿qué lecturas le damos a esta reunión? Decirle al titular del Ejecutivo estatal que todavía truena su pistolita, aunque muchos opinan que está embalada desde muchos años atrás y que Carrillo Zavala ha tenido el cuidado de vigilar su relación con las estructuras en el poder, aunque también no pocos opinan que sus quereres andaban en su ex secretario de Obras Públicas y ex alcalde de Campeche en su administración.

Curiosamente, estaba esa mañana el que fue su gurú jurídico, Alvaro del Carmen Arceo Corcuera, quien sacó provecho de esa relación siendo Presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado y Presidente de la Gran Comisión del Congreso local. Si mal no recordamos, Arceo Corcuera se está dejando ver con más frecuencia en los actos públicos y aunque sólo el sabe que ideología tiene (la última fue de perredista) con El Peje, actualmente se desempeña como Consejero Jurídico (Coordinador le llaman), en el actual gobierno Justo y Solidario. De nuevo priista pues.

En política no hay casualidades ¿qué mensaje le llevó Alvaro del Carmen a Carlos Ernesto Rosado Ruelas? Levantándose incluso de su sitio en el acto en el Congreso local para agacharse junto a la butaca del edil. Una persona como el actual coordinador jurídico no da paso sin huarache. El medio es el mensaje y al parecer el alcalde panista campechano lo recibió de buen talante pues hasta se sonrieron ambos. Todo esto ocurrió durante el informe de su primer año de labores de la “científica jurídica”, como desea que se le conozca a la doctora Guadalupe Quijano Villanueva. Con todo respeto Dottora, en el derecho se señala una regla que aplica la profundidad de sus conceptos pero la sencillez de su expresión, la analítica de su temática y lo completo de su actualización. El hombre mientras más docto, más sencillo.

BICENTENARIO Y CORDURA

Las fiestas del Bicentenario del inicio de nuestra independencia tuvieron incidentes significativos. Este año se había pronosticado como atípico en tormentas, huracanes y lluvias, hecho que se ha cumplido significativamente.

Todo estaba previsto para la noche del pasado 15 de septiembre que no sólo marcaba la fecha nacional señalada, sino también el primer aniversario de la toma de posesión del gobierno Justo y Solidario, año marcado por una crisis que nos antecedió y dejó las finanzas severamente castigadas.

El hombre propone… y eso nos ocurrió. Horas antes del evento las alertas nacionales se encendieron con la llegada a la Península de la tormenta tropical “Karl” y nos puso como el Estado con la mayor posibilidad de afectación. Ante ello el Consejo Estatal de Protección Civil, presidido por el titular del Ejecutivo estatal determinó adelantar la ceremonia del “grito” a las ocho de la noche y los demás eventos si las condiciones climáticas no representaban riesgo para la población.

En efecto la ceremonia se realizó en el actual edificio que alberga a la Biblioteca Central frente al parque principal de esta ciudad y con su orden del día precipitada por una pertinaz llovizna, el evento se realizó y luego fuegos de artificio o juegos pirotécnicos iluminaron la negra noche de tormenta. El acto de la Plaza de la República apenas se celebró a medias y se pospuso parte del mismo para más adelante. Quedó claro que nadie está por encima de la seguridad del pueblo y las medidas fructificaron. Los campechanos se retiraron a sus domicilios y se esperaba una noche de tormenta como bien conocemos los campechanos.

El gobierno se mantuvo en contacto con los 10 Campeches restantes y con el mismo grado de advertencia: primero la seguridad de la ciudadanía y luego los festejos patrios. El 16 de septiembre se efectuó el desfile conmemorativo aunque salpicado de cierta incertidumbre, pero se cumplió también.

La fortuna nos volvió a tratar bien. Hace unas semanas la primera tormenta tropical “Alex” con las mismas características de “Karl”, nos pasó encima sin mayores daños, aunque luego en la Sonda de Campeche se convirtió en poderoso huracán que dejó daños incalculables en Monterrey, Nuevo León y Tamaulipas. En esta ocasión ocurrió lo mismo y el nuevo huracán con categoría 3 en la escala de Saffir Simpson, dejó daños muy fuertes en el estado de Veracruz. ¿suerte o la providencia? Se les deja de tarea, pero estamos contándolo sin mayor problema, aunque sin festejo del Bicentenario.

Hay que recordar que en 1988 el super huracán “Gilberto” nos pasó encima un 14 de septiembre y obligó a Abelardo Carrillo Zavala y al edil José Medina Maldonado a suspender todos los actos programados para la noche del “grito”. En ese entonces si hubieron daños mayores y varios muertos como los de la colonia Cuatro Caminos de esta ciudad capital.

Las inundaciones de la ría de San Francisco y otras colonias, así como el desbordamiento de los ríos Candelaria y Palizada dejaron en emergencia a la entidad. Tuvieron que pasar varios meses y con pocos recursos porque el presidente Miguel de la Madrid Hurtado le dio preferencia a Cancún.

En esta ocasión la libramos.

LA IGLESIA EN MANOS DE LUTERO

El subsecretario de Fomento Pecuario de la Secretaría de Desarrollo Rural (SDR), Carlos Ortiz Lanz, “dictó una cátedra” para la recuperación del estatus zoosanitario, luego de la visita de la Comisión Binacional México-Estados Unidos, que dejaron recomendaciones específicas para Campeche, mediante 10 puntos entre ellos para que la SDR aumente sus plantillas de técnicos veterinarios y una mayor movilización de ganado, además de nuevas pruebas de tuberculosis en el Estado.

Ortiz Lanz dice que esas recomendaciones piden un nuevo “barrido”, es decir un muestreo general en los municipios de El Carmen, Escárcega y Candelaria donde se encuentra la mayor parte del hato ganadero.

Ortiz Lanz consideró que para cumplir estos objetivos hay recursos. Que el gobierno del Estado aportó 22 millones de pesos para sanidades pecuarias, mismo monto que el 2009, de los cuales 16 millones a la ganadería, debido a la disminución de recursos federales en el Programa de Activos Productivos, aunque se ha podido captar recursos por más de 10 millones de pesos. Pide además que en dos años se requerirán recursos de alrededor de 75 o 100 millones de pesos, dependiendo de “algunos ajustes”. Todo ello para recuperar el estatus zoosanitario.

Ahora bien qué pasa en esa dependencia (SDR) donde los elementos del Colegio de Postgraduados (COLPOS), están a su vez tratando de elaborar el proyecto de presupuesto 2011 de esa dependencia y al parecer no le encuentran la cuadratura al círculo, debido a que carecen de los mínimos conocimientos de administración pública y por ello están pretendiendo asignar 31 millones al programa de capacitación y asistencia técnica para las acciones de ese Colegio y para la (léase bien) la Universidad de Chapingo.

Es decir, quedarse con esa lana y repartir migajas a otras instituciones locales, en virtud de que ese dichoso programa que en este año tuvo nueve millones de pesos ha sido de simulación, proyectos inexistentes y jineteo de recursos para pagar a los técnicos contratados, que por supuesto no son del Colpos, quienes lo poco que han hecho ha sido con su peculio y esto es a todas luces irrelevante para los productores, porque los programas del campo no es de conocimientos y tecnologías sino de recursos para aplicarlos y poder incrementar la producción.

En el renglón ganadero, como señalamos al principio, se está haciendo negocio con la asignación de sementales y vaquillas a cargo del citado Ortiz Lanz, quien desde tiempo atrás en piedra toral en la Asociación de Criadores de Ganado de “Registro”, simulando en muchos de los casos ventas que se dan sólo en el papel, de las que se benefician incluyendo al mismo secretario de Desarrollo Rural, un grupo de falsos ganaderos-ganadores, plenamente reconocidos que por cierto llevan bastante tiempo medrando a pequeños productores, quienes no tienen otras opciones debido a su precaria economía, al ofrecerles animales de muy baja calidad y dudosa genealogía en no pocos casos, ya que igualmente controlan a los ganaderos de otros estados para que no oferten en las ferias ganaderas, como por ejemplo la que está instalada en el relleno sanitario, zona Ah Kim Pech de esta ciudad, a quienes le piden mochadas de 600 pesos por animal, ganado de mejor calidad, ya que los desplazan ante las porquerías que ofertan.

Por esta macolla el mejor conocido por esta columna Jaque Mate como “El abuelo Febo”, postuló a Ortiz Lanz con su hermana Adriana, ya que cuando estuvo en la SEP y luego en la Secud, el Colpos dependía presupuestalmente de esas instituciones.

Los proyectos estratégicos de Febo para controlar la SDR sin contratiempos ni inconveniencias, ha sido la de eliminar, arrinconar y bajar categorías y sueldos a los que no sean de su equipo y no correspondan a sus intereses y pudieran representarle problemas para tomar todo en la dependencia. Por su edad y tiempo por delante (máximo cinco años), no tendrá otra oportunidad.

Aquellos que no se sometan a sus órdenes y permanezcan con las bocas calladas (sin ver, oir ni hablar) serán recortados o sentados en la banca con vigilancia extrema y sin acceso a papeles comprometedores. Esta situación rompió la organización, clan, cártel o lo que sea, formado años atrás y que aparentemente si sabía donde mascaba la iguana al conocer la normatividad y tener conocimientos de la productividad, así como de la sensibilidad social para atender a los productores que acudían a la SDR en busca de orientación y apoyos que, por supuesto eran campechanos, situación que es diferente con las actuales autoridades estatales. ¿Esto es ser Justo y Solidario?

Febo puede ser lo que usted quiera pero tonto no es. Para conocer a Miguel, hay que vivir con él. Y de eso se valió el fuereño secretario al “sembrar” dos dignos traidores de los campechanos: José Luis Plascencia Mercado, secretario técnico desde los tiempos del califato con Eudaldo Espinosa Alvarez y de Harím Rodríguez de la Cruz, director en el municipio de Calkiní, elemento rescatado de la SAGARPA en épocas de Jorge Salomón Azar García, donde lo corrieron cuatro años antes. Estos Judas avecindados, para variar, y empleados de él en esa dependencia federal, señalaron a las personas inconvenientes, por el sólo hecho de no tener ni amistad ni afinidad. Resultado, esos puestos que necesitaban controlar ya están en el congelador de Febo, debido a las muchas quejas de productores contra ellos y además están encontrados con los “científicos” de Colpos, quienes los observan como gallina que ve lombriz, ya que no son “masters” o “doctores” como ellos.

La gente de Colpos que ha sembrado el famoso abuelo pero que si tienen buen nivel son: Natividad Hidalgo Flores (guanajuatense y su brazo derecho y principal operador político) a quien hizo subsecretario de planeación, capacitación y asistencia técnica, que no rebuzna porque no da la nota y que reprobaría una simple evaluación de geografía de Campeche. Esta persona es la que maneja y asigna virtualmente el presupuesto; se enriqueció en menos de lo que canta el gallo de la pasión en el Colpos. Es dueño de cuando menos dos casas y varios terrenos –va por más en la SDR-; otro más es Javier Vera Espinosa, al parecer carmelita, director de Planeación, con negocios de jardinería en la isla, brazo derecho de “ratividad” y totalmente sumiso a Febo; Fidel Ibarra Ortega, chilango jubilado de la SAGARPA, subdirector de Evaluación y brazo derecho de Vera Espinosa, verdadero cerebro del equipo –a la chita callando- y amigo del abuelo de muchos años atrás; Rafael Carbajal Reyna, también chilango, abogado, un auténtico “bofe”, jefe del departamento en el área de Planeación (?); Araceli Muñoz Canul y Amparo Dzul Sierra (fue ligada sentimental de Natividad en el Colpos), contadoras ambas, incondicionales ambas, y las dos manejan las comprobaciones, adquisiciones de los programas y la contabilidad personal de Febo. Una de ellas (Amparo), trata al personal con despotismo evidenciando su complejo de etnia pero con poder.

Lo mejor de todo es que Febo acomodó y les dio regular sueldo a los hijos de Esther Montenegro Colín, conocida servidora de personas de la tercera edad, directora de algo en la SECUD. Los acomodados son muy jóvenes y por lo tanto carecen de experiencia y todavía menos en aspectos de desarrollo rural. Uno de ellos fue colocado en la Dirección Jurídica y el otro en la Agrícola. Ambos sin oficio ni beneficio. Van cuando quieren y si asisten no hacen nada, son “Ninis” pues, pero con nivel de jefes de departamento, cargados presupuestalmente a programas –sin plaza- , además al primo de ellos Erick Montenegro Muñoz, asignado como mandandero de Natividad, asiste regularmente, pero no se sabe del nivel salarial que se le asignó.

Otro que es de las confianzas de Febo ya que fue su alumno en Colpos y que estaba ahí como director de maquinaria llevado por Jorge “Emiliano Zapata” Gracia, Esteban Ramírez, norteño, maestro de tiempo completo del ITA de Chiná ¿cómo le hará?. Esta persona ha hecho capital al grado de tener una manzana bardeada en Imí con casa y totalmente amueblada, es el que hace los negocios con Febo y Natividad quien es su jefe directo, manejando a su arbitrio combustibles, lubricantes, concursos de adquisiciones de maquinaria, pozos profundos, caminos rurales, etc. Son sus actividades principales.

Como colofón diré que Febo si tiene dos piedras en el zapato, ya que fueron enviados a esa dependencia desde los altos niveles: Genaro Abreu Barroso que desde que un día llegó a Campeche compitiendo con su lanchita no ha vuelto a pararse en Palizada, donde un día fue presidente municipal. Abreu es médico veterinario, subsecretario de Agricultura (irónico ciertamente) y Jorge Brown Filigrana, también del pueblo mágico, que se desempeña como coordinador de Programas Federalizados. El primero parece que suena como reemplazo de Febo y el otro porque evita en lo posible que accionen Natividad y nuestro actor del principio Carlos Ortiz Lanz. Para que la cuña apriete, ha de ser del mismo palo. Esto está pasando apenas en un año. Esperamos que el hombre que está al frente de todos los problemas y que no descansa, esté enterado de lo que en la SDR está sucediendo.

domingo, 12 de septiembre de 2010

BICENTENARIO SUI GENERIS

En poco más de 96 horas tendremos encima las fiestas del Bicentenario del inicio de la Independencia de México (el hecho se logró once años después, es un decir). Momento único para señalar tantas cosas que nos han pasado y otras tantas en las que seguimos igual, pero los festejos como decía Octavio Paz: “El mexicano ama las fiestas y las reuniones públicas. Todo es ocasión para reunirse. Cualquier pretexto es bueno para interrumpir la marcha del tiempo y celebrar con festejos y ceremonias hombres y acontecimientos. Somos un pueblo ritual”.

En la lucha libertaria de México hay quienes afirman que no existieron campechanos que lucharan por la independencia, pero existen. En especial hay que recordar al ilustre marino campechano que peleó en la batalla de Lepanto, D. Pedro Sáinz de Baranda y Borreyro, quien desde Alvarado, Veracruz donde se hallaba al frente del comando militar, acudió al llamado de Antonio López de Santa Ana, pero que le hizo sospechar un común acuerdo entre éste y Lemaur, para entregar traidoramente las fuerzas navales a su cuidado.

Sáinz de Baranda, está considerado por la historia como el vencedor del último reducto español en tierras mexicanas al derrotarlos en la fortaleza de San Juan de Ulúa, Veracruz. Pero curiosamente en Campeche tiene una categoría de prócer de segunda.

Sin embargo la historia consigna que en la Península de Yucatán no hubo guerra de independencia, porque en el año de 1821 en este territorio mexicano era unánime el sentimiento contra el régimen colonial. El Ayuntamiento de Campeche aconsejaba un entendimiento con el jefe insurgente de Tabasco, y comunicaba además que había tomado algunas precauciones para que el orden público no fuese alterado en Campeche durante la fiesta de San Román. Lo anterior fue bastante para que el capitán general español Juan María Echéverri, convocara en Mérida, Yuc., a la junta general del día 15 del propio mes de septiembre, en la que se proclamó la independencia.

Esta proclamación de la independencia de México la firmaron en Mérida el propio capitán general Echéverri y las principales autoridades, y entre éstas los liberales campechanos Pedro Manuel de Regil y Pablo Lanz, vocales de la diputación provincial; el regidor Manuel Carvajal, el comandante de cívicos Francisco Antonio Tarrazo, el coronel de artillería Juan Rivas Vértiz.

El primer lugar de la península yucateca (en ese entonces) en que se enarboló el pabellón mexicano, fue el palacio municipal de San Francisco de Campeche, hecho que aconteció el 14 de octubre de 1821. Alguien debe de decirle al actual alcalde panista que cuando menos adorne el ex cuartel Pedro de Baranda, porque da la impresión de que las fiestas patrias le están pasando encima sin que lo sienta. Pobre alcalde sus consejeros tal vez de lo que le hablan es de baches y traiciones.

Pero aún más, el primer nombramiento para jefe superior político y capitán general de Yucatán, al consumarse la independencia, lo hizo el Ayuntamiento de Campeche, a favor del coronel de ingenieros Juan José de León y Zamorano, campechano por afección y antiguo teniente del rey residente en la ciudad de Campeche

Por lo que se observa los patriotas campechanos quedaron olvidados de la historia, pero también es cierto que debido a que los primeros divisionismos entre Campeche y Yucatán se escenificaron precisamente en la década de 1820, los nombres de los nacidos en esta tierra que se afirma –sin pruebas de ello- han quedado asentadas en diversos documentos históricos como naturales de otras entidades. No basta afirmar que tal o cual hijo de campechanos o campechanos que dejaron esta tierra hayan participado no con un fusil en la contienda, pero si en la política que devino en nuestra independencia nacional. Habré de estar pendiente de los que se mencionen próximamente para opinar en consecuencia.

Mientras tanto, en Campeche no habrá espectáculos multimedia –como es el caso del D.F.-, ni expo-Bicentenario como en la tierra de Vicente Fox. En nuestra capital no habrá derroche, y no por que seamos menos patriotas que en otros estados, sino porque los recursos siguen siendo la piedra toral de los problemas que se enfrentan desde el inicio de esta administración. Sin embargo, cada pobrete, lo que tiene mete y el festejo será hasta cierto punto austero.

El hombre responsable de la cultura dejó en las manos de Alfonso Esquivel, el manejo de las fiestas del Bicentenario y Centenario. Tal parece que lo que esta persona quiere es que todo salga mal, porque hasta la fecha no pudo, no quiso y no supo armar un programa atractivo para que en campechito se festeje el Bi y el Centenario. El Ayuntamiento de Campeche, es cierto que no es la autoridad responsable de estos festejos pero la coparticipación pudo haberse dado, aunque también allí falta imaginación. La joven marciana (o algo así) se le quemaron los frijoles y no pudo discernir ni siquiera los 445 años de la llegada del Cristo Negro de San Román. En esa área de la comuna todo se va en imagen, aparecer en los medios, coronar hasta los santos y hacer un desbarajuste en los acomodos de los juegos mecánicos, que este año para beneplácito de los sanromaneros volvieron a las inmediaciones de la iglesia. Se rumora que el mismo párroco tuvo que meterle organización antes de que se convirtiera en un caos.

Si la voluntad y la capacidad de elaborar proyectos existiera en el feudo panista se pensara en que en Campeche existen decenas de campechanos ilustres que ya cumplieron su ciclo de vida y están en las praderas de Manitou. Una Rotonda de los Campechanos Ilustres bien hubiera sido una obra para trascender. El lugar existe, el propio Ayuntamiento dispone del terreno en la colonia Montecristo, que desde el trienio de Víctor Manuel Méndez Lanz, fue un trueque entre Ayuntamiento y la extinta Cooperativa Esperanza (aquella de los camiones verdecitos y administrada por políticos). El sitio se encuentra a espaldas del Cementerio de San Román y a menos de 100 metros del monumento al Maestro de América y del malecón.

Hay tantas cosas que se pudieron hacer que más vale no seguir mencionándolas. Todo quedará en megaacarreos y “chan obras”, como llamó Fernando Ortega Bernés, a quienes construyen obritas de relumbrón. Lo que si estamos seguros habrá este 15 de septiembre son toneladas de juegos pirotécnicos. Y lo que no faltará será la “vaquería” famosa que un buen día hace ya una década se le ocurrió a una primera dama que le gustaba zamarrearse la aponeurosis cerebral y quien la suplió vino de Becal, Calkiní y desapareció el traje regional de campechana y lo sustituyó con el hermoso terno de mestiza yucateca, que puede ser muy bonito pero que no es nativo de esta tierra, además de que su costo puede ser (para la élite que funge como corifeo) hasta de 30 mil pesos y olvidan que en Yucatán se clasifican hasta en la manera de colocarse el lazo en la cabeza (a la izquierda soltera; a la derecha casada y en medio con pareja o novio). Total costumbres que no son propias de la idiosincrasia de Campeche. Si resucitaran de nuevo se morirían ipso facto las viejas familias de abolengo como por ejemplo las Preciat y las Arrigunaga que tenían en el traje regional los vestidos de gala de sus sirvientas con tan poco costo, además de dos juegos de chancletas bordadas y medio tacón.

Señala Enrique Krauze, en su Siglo de Caudillos que a “día tras día se inauguraban obras materiales y de beneficencia cuyo objeto era dar testimonio del progreso que por fin, luego de un retraso de siglos caracterizaba la vida mexicana. Don Porfirio Díaz, había dado al país desde su lejano ascenso al poder en 1876: obras portuarias, excelentes vías férreas, teléfonos, telégrafos, correos”. Sólo ocho meses más tarde estaría dejando la presidencia de la República como resultado de una rebelión que ya la represión no pudo contener, pero, los festejos eran los festejos y se hacían a todo lujo, en obras y en fiestas como las del primer centenario de la Independencia.

“Un desperdicio y una mezquindad entre los mexicanos, no celebrar los aniversarios, pues es una mayoría aplastante la que se ha unido a los festejos”, dice cachondamente el secretario de Educación Alonso Lujambio. Aunque nadie sabe cómo contó el sucesor de Justo Sierra Méndez y José Vasconcelos “esa mayoría aplastante”.

Hay biografías, historias generales, novelas, historias, investigación de hechos específicos, rescate de personajes con perspectiva de género como el libro que en estas fechas se dará a conocer por dos autores que llegaron a sintetizar versiones y opiniones, que dicho sea sin ánimo de ofender, pero habría que investigar a su vez si son ciertas esas historias o producto de la elucubración de una de esas personas a la que por cierto no añoran en la Profeco. Porque estoy seguro se aparta en ciertos pasajes de lo que nos han contado hasta ahora. La verdad histórica de los campechanos sigue sin ser conocida, porque se pierde ya en la noche de los tiempos. ¿Leyenda? Tal vez sería mejor un libro como ensayo, pero no como revelación maravillosa que se aprovecha de estas fechas y convence a Esquivel, ese que dijo que pagó dos millones de dólares a Andrea Boccelli, pero que ese asunto nunca quedó claro y siempre hay un vencedor: el que paga y recibe diezmo.

Quizá lo único rescatable sea la cantidad de artículos, títulos de libros y revistas, aunque no todos con cargo al presupuesto de estos festejos.

El marketing de este año ha girado sobre el Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución: “bicentenario para una tarjeta de crédito; un préstamo para viajar; una casa para adquirir; un coche, etcétera, y así hasta el infinito. Es una oportunidad única que nadie que hoy sea adulto y hasta niño en sus primeros años podrá vivir dentro de 100 años. Sólo una vez en la vida se vivirá este acontecimiento.

¿Celebración más que reflexión? Los festejos porfirianos si fueron de calidad y que los realizó el dictador oaxaqueño en recuerdo a la gesta histórica del cura Miguel Hidalgo y Costilla (El cos, para los narcos), quien por cierto el grito de arenga esa madrugada del 16 de septiembre fue: “Viva Fernando VII”. Muestra clara de su lealtad a la monarquía.

Vivimos, querrámoslo o no, en un mundo ya del iluminismo. Algunos de los principios de esta corriente ideológica son: el laicismo, la dignidad humana, la tolerancia, las garantías individuales, la igualdad política y social, el sometimiento del poder a la ley, el Estado al servicio del pueblo, el conocimiento y la educación como armas para sacar a los mexicanos de la miseria e ignorancia, el ejercicio honesto del gobierno. Conceptos que se llevan muy mal con el conservadurismo de los últimos 10 años en el gobierno federal. Ciertamente, hay que ir más a fondo en lo que signifique una verdadera independencia y su actualidad como proyecto histórico de largo alcance, es decir, cortar y desechar las correas que nos han sujetado para dejar de ser perros.

Pero quién piensa en ello la noche del próximo 15 de septiembre. Esa noche, los amigos que durante meses no pronunciaron más palabras que las prescritas por la indispensable cortesía, se emborrachan juntos, se hacen confidencias, se critica a los nuevos funcionarios públicos, se les desnuda su vida privada, pero al final lloran las mismas penas, se descubren hermanos y a veces hasta para probarse se lían a golpes o se medio matan entre si. La noche queda corta, se llena de canciones mexicanas de nacionalismo ramplón y de aullidos que no canciones. Los enamorados despiertan en moteles o en la parte de atrás de sus vehículos y buscan seguirla en otro lado. Hay diálogos y burlas de mesa a mesa en restaurantes. Se arrojan sombreros de medio pelo al aire. Las malas palabras es el común denominador porque el campechano es macho. Hay riñas, injurias y si algunos son insolentes. En esos casos la alegría termina en el Ministerio Público, donde el adalid de la justicia, se las ve y las desea para integrar bien cada expediente y sambutirlos en el bote y enviarlos al Resort de San Francisco Kobén. Todo eso forma parte de los festejos. Porque el campechano no se divierte: quiere sobrepasarse, saltar el muro de la soledad que el resto de año lo seguirá convirtiendo en Juan Perro. Felices fiestas del Bicentenario. ¡Viva México! ¡Viva Campeche!

Mate al pastor.

ICA 2 – MALL 1

Finalizó el juego y los españoles cayeron al son de 2 por 1 ante ICA, luego de que un juez federal avaló la asamblea de accionistas que en jugada de pared había empatado el partido comenzando el segundo tiempo del encuentro entre La furia de los Noval y los celestes de Bernardo Quintana. El partido había desde un principio arrojado la falta de calidad de las jugadas de los españoles, quienes se valieron de mil marrullerías que un árbitro les dejó hacer en el segundo tiempo, pero que finalmente no hubo necesidad de llegar a los tiempos extras, y mucho menos a los penaltis. Campeche, Playa, Golf y SPA Resort ya está en poder de Ingenieros Civiles y Asociados, empresa mexicana que los campechanos esperamos que hagan realidad ese desarrollo turístico en donde los intereses creados desde las esferas del pasado gobierno estatal impidieron aplicar la ley.

Ya lo habíamos comentado desde la primera información de la saga de esta historia generada en el “sexenio de las piedras”, en ese entonces la primera convocatoria buscaba terminar el relajo a que se habían acostumbrado Julio Noval García y Julio Noval Arias, quienes triangularon recursos financieros entre Campeche, Panamá y España. Al principio todo fue miel sobre hojuelas, pero ¡rediez! Tanto va el cántaro al agua… Tarde que temprano el resultado se esperaba y la guadaña la aplicó ICA que había salvado de la quiebra total a este complejo turístico ubicado en Champotón, Campeche.

La chicanada jurídica de hace unas semanas le estalló en las manos a los Noval, porque ni con el tiempo que lograron emplear para sobrevivir fue suficiente para cambiar lo que no podía cambiarse. El Proyecto Esmeralda Resort que constituyeron para construir el complejo y que aparentemente el juez federal que suplió a su homólogo en período vacacional lo único que hizo fue dar un compás de espera que, finalmente el juez encargado del despacho permitió la remoción de los miembros del Consejo de Administración que tenían a su cargo los Noval padre e hijo, por tanto este juez Segundo de Distrito con sede en esta ciudad de Campeche, dio validez a la asamblea de accionistas, luego de la apelación de ICA, según da a conocer el Periódico Oficial del Gobierno del Estado de Campeche con fecha del día 10 de septiembre de 2010, mismo que también dio a conocer fuentes del Consejo de la Judicatura.

Recapitulando señalamos parcialmente lo que esta columna Jaque Mate había ya comentado desde semanas atrás: Campeche gana con este resultado porque ICA no va a dejar asentado lo invertido, sobre todo que pesa sobre ese desarrollo turístico una serie de demandas de clientes extranjeros que cansados de exigir el cumplimiento de sus contratos de compraventa demandaron al Grupo Mall.

En este sitio hasta la fecha hay una inversión con números de 600 millones de dólares (cerca de ocho mil millones de pesos), donde se levantarán tres mil 45 viviendas 750 de las cuales debían estar listas desde el pasado 5 de agosto de 2008, que pese y a la fuerte inyección de recursos del erario estatal del pasado gobierno, no fue inaugurada esa primera etapa. Los españoles culparon a ICA de retrasos en la terminación de varias obras del complejo de 308 hectáreas, que la empresa mexicana edificaría con el respaldo financiero del Bank of New York Mellon, los representantes legales de Mall argumentaron que si bien la empresa española celebró un contrato de prenda sobre acciones con ICA el pasado 11 de diciembre de 2008, los derechos inherentes a las acciones, particularmente los corporativos, le seguían correspondiendo ya que poseen el 93.49 de las acciones que le permitieron destituir a toda la anterior asamblea presidida por Julio Noval García.

A partir de este momento y ya con los pelos en la mano los abogados de ICA habrán de apersonarse al Registro Público de la Propiedad y del Comercio con los resultados de la última asamblea para emprender en serio y hasta terminar ese desarrollo que ha tenido muchos problemas por la falta de responsabilidad, el exceso de privilegios y los intereses en juego con el apoyo de un gobierno que ya se vio, no logró consolidar ningún negocio en Campeche y por el contrario se echaron a la basura cerca de mil millones de pesos en infraestructura diversa que fue sin duda a fondo perdido.

Si ICA se decide a poner los puntos sobre las íes es posible conocer quiénes están detrás de los españoles, que como se ve, conocen de desarrollos turísticos tanto como usted y yo de física cuántica.