domingo, 30 de octubre de 2011


ENCOMIABLE LABOR SOCIAL

El pasado viernes rindió su segundo Informe de labores al frente del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia, su presidenta Adriana Hernández Hoffman de Ortega, donde dio a conocer no un informe, sino un condensado de su amplia labor al frente de ese organismo asistencial.

Hay mujeres que se afanan más cuanto más discreta es su labor. Ellas son las indispensables. En la ya larga historia de esas féminas en Campeche, todas han tenido una destacada participación en apoyo a las labores de sus esposos, los titulares del Ejecutivo estatal. Y en esta ocasión vienen al recuerdo los nombres de Socorro Cabrera de Rodríguez, Elsa San Román de Sansores, Dolores Lanz Peña de Echeverría, Luz Alba  Delgado de Carrillo,  Lydia León de Azar, Elvia María Pérez de González, María del Carmen Montero de Hurtado, todas ellas que transitaron esos 42 años en una magnífica entrega a las clases más vulnerables.

Nunca se da tanto como cuando se dan esperanzas, decía Anatole France y eso es parte de la labor de la asistencia social, protección a mujeres, niños y discapacitados, porque dar tanto con tan pocos recursos es algo que no se comprende hasta que se valora en su exacta dimensión.

Los Once Campeches como su esposo los clasificó, ha sido atendidos con un desempeño eficiente, generoso, eficaz, sencillo, hábil, sin estridencias ni excesiva publicidad. Eso se lo reconoce y admira la comunidad campechana, especialmente los más necesitados.  Niños, ancianos, madres de familia, aquellos con capacidades diferentes, enfermos y un largo etcétera, quienes durante estos doce meses que nos anteceden recibieron la visita de esta dama y su grupo hasta la más remota de las comunidades de nuestra entidad.

Hernández de Ortega no dejó de reconocer que la falta de recursos no ha afectado los programas asistenciales, pero que se sigue trabajando para hacer más con menos. Este año en especial señaló que ha iniciado una campaña de concientización a todos los campechanos para respetar el uso de los espacios destinados a personas con discapacidad y varios aspectos más sobre el apoyo irrestricto a estos campechanos que deben gozar de esas prerrogativas que hoy cuenta con el respaldo de la ley.

Durante su intervención que tuvo la presencia de un representante de la esposa del presidente de la República, Margarita Zavala de Calderón; de las esposas de los gobernadores de Oaxaca, San Luis Potosí y la de Yucatán, hermana de la gobernadora del vecino estado, D. Adriana dijo que “el DIF es la conciencia de los gobiernos y se hace presente en la sociedad”.

La presidenta del DIF estatal hizo un llamado al Congreso local para que apoyen la iniciativa turnada por su esposo el gobernador, para hacer más ágiles, a través de los juicios orales, la pérdida de la patria potestad cuando esté en riesgo la integridad física y psicológica de los niños, lo que agilizaría el proceso de adopción.

Fue muy aplaudida Hernández de Ortega cuando dio a conocer que en materia de asistencia alimentaria el DIF Campeche pasó del lugar 30 al sexto a nivel nacional, al brindar diariamente 38 mil desayunos. Todo un logro social.


UN ORGULLO CAMPECHANO EN LA OBSCURIDAD

El primer edil es panista; los panistas son irreductiblemente católicos, lo traen en su fe de bautismo político; los católicos son creyentes en la doctrina de Cristo; la doctrina del Salvador está fundamentada en el Bien Común; pero es el caso de que Carlos Ernesto Rosado Ruelas, se encuentra totalmente perdido en su laberinto ideológico al estar pensando no en el cordero de Dios, sino en el Cordero de Calderón Hinojosa.

Resultado, con todo y las reuniones a las que ha asistido y seguirá asistiendo hasta que brinque al próximo cargo, Rosado Ruelas no comulga con ruedas de molino, porque si de pagar se trata le queda a deber hasta a su propio Obispo de la Diócesis, al que dejó en obscuras por tercera ocasión en lo que va del año, a la Catedral de Campeche, auténtico monumento histórico y emblema de todas las promociones turísticas del Estado.

El edil dejó de pagar 60 mil pesos del recibo de luz correspondiente al bimestre inmediato anterior y la “cumplida CFE”, el pasado jueves dejó en las tinieblas el templo católico con todo y sus torres cuasi gemelas (una es más alta que la otra).

Se afirma que desde hace dos años el servicio de energía eléctrica de la parte exterior del templo es pagado por la Comuna, con recursos provenientes de la UNESCO, por estar considerado Campeche Patrimonio Cultural de la Humanidad.

El Obispo tiene razón en lo referente a que ese servicio debe de ser pagado por quienes promueven turísticamente a Campeche. Así se acordó, pero parece que tanto a la CFE como al Ayuntamiento de Campeche se les hizo más fácil aplicar aquello de que “Al César, lo que es del César y a Dios, que le vaya bien”.


AUSTERIDAD ¿SOLO UNA POSTURA?

Todos los políticos hablan de austeridad en determinados momentos en que el agua les llega a los aparejos. El único en los anales de la historia que ha cumplido con esa palabreja es Adolfo Tomás Ruiz Cortines “Adolfo el viejo”, quien desde el primer día de su mandato amenazó y cumplió en los hechos con la austeridad.

Durante su toma de posesión destacó las carencias de los ciudadanos luego de un gobierno como el de Miguel Alemán Valdez. Ahí en el Palacio de Bellas Artes, lugar de la toma de posesión habló de un plan de emergencia y austeridad “para poner al alcance del pueblo el maíz, el frijol, el azúcar o el piloncillo, las grasas comestibles, la manta, la mezclilla y el percal y afirmó que sus colaboradores se sujetarían a patrones de honestidad administrativa y preocupación patriótica más rígidos que nunca”.

Ruiz Cortines, desechó a los hombres jóvenes que le había heredado Alemán Valdez y los sustituyó por hombres experimentados y capaces, ajenos al alemanismo. “Adolfo el viejo” como lo llamaron sus enemigos, buscaba una cualidad de cultura para servir al pueblo y no servirse de él.

En vista de una política que contrastara con el régimen pasado, Don Adolfo, ---que por cierto operó el dedazo a favor de Alberto Trueba Urbina--- dio inicio a lo que sería la primera y auténtica era de austeridad y moralización. Modificó la ley referente a la responsabilidad de los servidores públicos que apuntaban de forma indirecta a ser corruptos, al proponer Ruiz Cortines que dichos funcionarios declararan sus bienes antes de iniciar sus labores y que se pudiera investigar el origen de sus fortunas a quienes poseyeran propiedades superiores a sus ingresos económicos.

Ese gobierno decidió reducir el gasto público ajustándose a los ingresos corrientes, con el propósito de lograr el saneamiento de las finanzas públicas y combatir la inflación. Los empresarios estaban desconcertados por ese nuevo estilo de gobierno, temiendo que sus posibilidades de ganancia se vieran afectadas en el momento en que la economía mexicana atravesaba por una crisis.
Esto propició la incertidumbre en la industria privada y la fuga de capitales. En 1953 se redujo la inversión privada, ante ello el presidente de México reorientó su política para reactivar la producción. Orto y ocaso de la austeridad.

Al término de su mandato don Adolfo y su esposa se retiraron a la vida privada. Cuando se le invitaba a participar en actos políticos, aclaraba que pertenecía “a la augusta institución de los ex, quienes tienen como primer deber respetar al que es y evidenciar absoluta disciplina”. (Esto debieran colgárselo bajo la oreja Rafael Rodríguez Barrera, Carlos Pérez Cámara, Abelardo Carrillo Zavala, Jorge Salomón Azar García, José Antonio González Curi y Jorge Carlos Hurtado Valdez, quienes no han dejado la política, pero tampoco de ser millonarios).

No recordamos que durante los gobiernos de González Curi y Hurtado Valdez haya existido austeridad, porque en principio Ricardo Rodríguez Dives y Jorge Luis González Curi, viajaron al extranjero con séquitos enormes durante seis años cada uno y que se sepa ningún beneficio se observa en esos costosos viajes. Por ejemplo aquellos viajeros de Lombardía que fueron agasajados a cuerpo de rey, jamás volvieron ni mandaron una carta de agradecimiento.

Mucho se habla acerca de la austeridad en los presupuestos gubernamentales, sin embargo tal parece que quienes manejan los presupuestos públicos desconocen el significado de la palabra austero. Pues bien, de acuerdo al diccionario del castellano, la palabra austero, es un adjetivo con el cual se califica una acción de gasto para fines presupuestales.

De ahí, que austero se pueda entender como severo, estricto, sencillo, rígido, moderado etc…etc., connotaciones que pudieran entenderse como sencillo “seriedad en su elaboración sin aspavientos”, estricto “respecto a su ejercicio”, rígido “acerca de su aplicación respecto al gasto”, sobriedad rigurosa con que se actuará” y así muchas pero muchas más expresiones de ocurrencia.

O sea que todo depende de la acción que se quiera calificar, desafortunadamente para el despistado pueblo de México, piensa que austeridad para los políticos significa no gastar o gastar menos de lo que gastan nuestros sacrificados servidores públicos o expertos en las técnicas de los manejos del erario. Craso error.

Esta especie de humanos mortales con su perorata y terminología hacen o al menos intentan hacer creer que gastarán menos o que lo harán de mejor manera, que antes, los recursos que le quitan al pueblo de acuerdo a las leyes fiscales y por atinos establecidos en la carta magna, para que los mexicanos alcancen bienestar social, económico y político.

¿Por qué? en la constitución federal y locales nuestros representantes no muy populares han dejado establecido que debemos colaborar con los gastos del gobierno y funciones específicas muy importantes para que el estado hecho gobierno, sea responsable de conseguir el tan deseado bienestar de un pueblo abatido y, quien nos lo otorga a través de servicios como: los asistenciales, de salud pública educación, infraestructura social y productiva, democracia a la mexicana, tranquilidad, paz y justicia; así como de hacer guardar el estricto respeto al derecho de cada quien, en su persona y bienes de su propiedad y otras muchas más. Como ocurre en Campeche, aquí disfrutamos todos.

Desafortunadamente aun cuando al pueblo se le reducen sus ingresos disponibles para gastar en la compra de mayor cantidad de bienes y servicios con los miserables sueldos que el propio estado establece a través de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos, eso si muy mínimos, para no crear una carrera alcista entre precios y salarios; los esfuerzos del gobierno en todos sus niveles son mínimos en relación al esfuerzo y sacrificio que debe padecer el pueblo, para sostener una burocracia privilegiada con altos y jugosos sueldos y prebendas en desgloses de partidas presupuestales como gastos de orden social, gastos de representación, comunicación social y un sinnúmero de asignación de fondos que son las tajadas de los ganones funcionarios de alto y mediano nivel de nuestra sagrada burocracia, como secretarios, subsecretarios, asesores, secretarias ejecutivas, directores de área, directores generales y todas la parvada de puestos importantes dentro de las secretarias de estado y que con estricto apego, se reparten el botín presupuestal los llamados tres poderes de la Unión: ejecutivo, legislativo y judicial. Yo les llamaría los mosqueteros distribuidores de los fondos del erario mexicano. 

En realidad los políticos o quienes trabajan en la administración pública utilizan la palabra austeridad, como un slogan, para hacer creer a sus gobernados, que los recursos de que disponen para gastar son precarios, por eso anuncian que están aplicando criterios de economía austera en el manejo presupuestal.

Sin embargo, muchos saben que la realidad es otra, la experiencia nos ha enseñado que no es así y que le mienten al ciudadano. Por ejemplo, en nuestra entidad hablan de austeridad, haciendo señalamientos diciendo, hemos   congelado las plazas, no hay nuevas contrataciones, reduciremos el gasto corriente, etc.

Pero acaso, no podemos pensar que hayan restringido el uso de celulares, de vehículos oficiales, energía eléctrica, administración de puestos de trabajo, en el pago de apoyos a paleros en la secretaría  de Gobierno, reducido el número de asesores, gastos en comunicación social, banquetes y comidas, compras de consumibles para centros de cómputo, material de oficina, cursos de capacitación y otros muchos; han corregido fallas al asignar puestos a quienes desconocen cómo administrar las áreas de gobierno sin crear conflictos, quienes fueron  nombrados por amiguismos, compadrazgos y recomendaciones.

De haberse tomado acciones en contra de lo antes mencionado, quien maneja los recursos dejaría de tener tanta preocupación, por tratar de conseguir más asignaciones de hacienda federal, cuando saben que a estas alturas, no les darán más que, lo que les corresponde por ley. Los políticos bien entienden que 2012 es año electoral y no van a soltar más del erario federal para financiar campañas, más que las suyas propias, las del pan de cada día.

Por tal razón, hay que apagar las luces del palacio a temprana hora, hay que reducir el número de asesores que no sirven para nada, hay que dejarles de pagar a los paleros como apoyos al “Güero” Vallejo por luchar por las causas del pueblo, Luis Antonio Che Cu, super líder de las causas campesinas, que le pagan sueldo y oficinas en todo el estado y otros muchos más que están en la lista. Hay que reducir los “chayos” a periódicos, revistas y canales de TV, hay que dejar de contratar cursos en gobierno y escuelas donde los repagan y sobrefacturan. Usando nada más que los indispensables; que los funcionarios salgan temprano de palacio para que dejen de hablar por teléfono a sus novias y ahorren energía eléctrica apagando luces y climas; a quienes quiten de un cargo por conflictivos y malos administradores déjenles de pagar y no los comisionen ni al PRI ni a la coordinación de asesores, como se ha vuelto costumbre, ahí tampoco van a servir de nada y siguen cobrando, ni los manden a otra área como asesores porque siguen cobrando lo mismo que ganaban en el puesto de donde los quitaron, son rémoras del sistema. Vigilen el costo de las obras contratadas y las compras de equipo y materiales que resultan bastante caras, porque conllevan diezmos en su costo.

La razón y realidad de este Campechito y la farsa se da en cuánto se gasta y cuánto se ingresa, preguntémonos adonde se está gastando nuestro dinero –ya el gobernador dijo que es del pueblo---, además de los adornos de la educación que casi a diario vemos por televisión y que no la mejoran en nada; donde hay obras sobresalientes e importantes en el estado a favor de los campechanos, que nos den una lista detallada.

Pero si les podemos decir robos los hay y la Procuraduría General de Justicia lo sabe, que los resuelva, caminos estatales en mal estado que los reparen, escuelas hay con carencias, que les cuiden las manos a quienes las administran ahí también hay dinero federal y estatal.

Para hablar de austeridad hay que ahorrar, para procurar y prevenir gastar en lo prioritario, pero el gobierno debe saber qué es y donde está lo prioritario qué requieren los campechanos, para que ahí sea donde gasten. Pero si se anuncian austeros, cuando no lo son, les seguirá alcanzando lo que reciben y seguirán gastando en lo mismo pero sin resultados a favor de este noble valiente y leal pueblo sus gobernados, andamos mal. 

Eso sí, vamos a requerir mucha, pero mucha lana para proyectar a quienes tienen en sus listas los partidos políticos como el PRI y el PAN, para la reingeniería que requieren nuestros noveles políticos más los inventados, que tienen sueños y aspiraciones de llegar al menos a las diputaciones locales, federales, a senadores, presidentes municipales y regidores; ese si será un gran costo que a fin de cuentas pagaremos todos los campechanos que piden bienestar en lugar de políticos.

En esta ocasión los beneficiarios serán los paleros y los líderes de organizaciones y asociaciones políticas que cobran, nada gratis; los comisionados al partido y escuelas, que trataran de movilizar al pueblo más fregado con promesas, dádivas y despensas. Ahí se va nuestro bienestar.


CUANDO VEAS LAS BARBAS DE TU VECINO CORTAR…

Hay focos rojos con la permanencia de Humberto Moreira Valdez al frente del CEN del PRI, porque apenas el pasado viernes fue detenido su ex secretario ejecutivo del Sistema de Administración tributaria del Estado de Coahuila (SATEC) Héctor Javier Villarreal Hernández, e internado en la cárcel de esa entidad por el uso de documentos falsos y equiparado al fraude por simulación de actos jurídicos y aunque salió libre bajo fianza el hecho pega bajo la línea de flotación en el ex del Edomex.

Se le acusa de haber intervenido en la contratación de manera irregular de créditos por tres mil millones de pesos. Utilizó documentación apócrifa apoyada en documentos  falsificados.

Es posible que este hecho acelere la salida de Moreira, porque estaría dañando la figura de Enrique Peña Nieto, en momentos en que se acerca la selección del candidato a la presidencia de la República.

No hay comentarios:

Publicar un comentario