TAN VIEJO COMO SU PROPIA HISTORIA
Al frente del Comité Directivo Nacional, Humberto Moreira Valdez reeditó el viejo esquema de las llamadas candidaturas de unidad que quedan a varias cuadras de distancia de la democracia interna y hasta de la democracia transparente que repitió cuando tuvo ese cargo el desaparecido Carlos “El negro” Sansores Pérez. La actual, propone sus documentos básicos bajo el principio de que no se puede hablar de democracia hacia fuera si antes no se practica hacia adentro.
Se dice que es la única forma de consolidar la unidad del partido y así evitar los consabidos pleitos que al final del día acaban siendo de suma cero. El que gana, gana todo y el que pierde es aplastado.
A Moreira Valdez nadie lo eligió pero todos lo aplaudieron. Lo impuso eso que el innombrable (hoy ya tiene nombre de nuevo) Carlos Salinas de Gortari, llama “la nomenklatura”, que ahora tiene su sede principal en el Estado de México.
Se dijo que era el hombre idóneo para conducir al PRI en tiempos electorales y recuperar la presidencia de la República en el 2012. Su misión es cuidarle la espalda al hombre de los spots Enrique Peña Nieto y responder a la violencia verbal de los panistas que ya ven en el gobernador mexiquense a un contendiente imposible de vencer.
Moreira Valdez no hace acuerdos sino devuelve golpes con un lenguaje pendenciero y coloquial que parece ser el único que entienden los panistas de Maderito y sus siete enanos.
Con un esquema parecido a la designación del ex gobernador de Coahuila se dieron las cosas en Campeche a la hora de sustituir la dirigencia virtual del Senador –también virtual- Alejandro Moreno Cárdenas.
Conocedores los priistas de los orígenes y la fuerza política que ha sostenido a Miguel Angel Sulub Caamal, ninguno se atrevió a registrarse en el proceso interno que conduciría la trabajada Margarita Rosa Alfaro Waring, quien se limitó a un acto puramente protocolario del registro de un solo aspirante. Para que haya pleito y por supuesto democracia, se necesitan dos. Los tiempos cambian y las circunstancias también.
Beatriz Paredes Rangel llegó a la dirigencia nacional, en un segundo intento (en el primero la arrolló Roberto Madrazo Pintado), legitimada con los votos de los priistas y luego de una agitada campaña interna.
Los mismo le sucedió a Raúl Pozos Lanz que en su tiempo tuvo que competir, hacer campaña interna y ganarle a un contendiente, si bien débil al fin contendiente -para darle visos de democracia- que fue Jorge Lazo Pech. Así pudo el hoy titular de Sedesore construir un liderazgo y ostentar una legitimidad como muy pocos dirigentes locales han tenido, hasta que las presiones del Califato lo corrieron porque lo acusaron de ser parcial a favor de Fernando Ortega.
Pero parece que ya no son tiempos para andar jugando a la democracia, porque sin duda el PRI sigue siendo “la fuerza de Campeche”. Y para que tantos brincos estando el suelo tan parejo.
Sulub Caamal, llega a la dirigencia estatal con fuertes apoyos políticos pero con escasa legitimidad y un liderazgo que tendrá que construir con su desempeño, si es que quiere quitarse la etiqueta de empleado del Ejecutivo estatal, sin luz propia ni capacidad para decidir, pese a que muchos le han endilgado ser el “muchacho de los dieses”.
Integró su Comité Directivo Estatal con pocas caras nuevas, pero carece de operadores políticos con experiencia que lo ayuden a preparar los escenarios electorales del 2012. Formado en la administración pública, sigue creyendo que para ser eficaces basta con tener empleados capaces de seguirle el ritmo, pero incapaces de pensar y actuar por si mismos.
El discurso del Presidente del “nuevo PRI” es el mismo que pudieron haber dicho hace más de medio siglo Fernando “El juech” Turriza Peña o Nicolás “El chuy” Canto Carrillo. Le falta la frescura que se esperaba de un dirigente joven, actualidad y, sobre todo, congruencia entre lo que se dice y se hace.
Y para muestra dos botones: El ex contralor del Estado dijo en su discurso de toma de posesión que “Los sectores del PRI deben ser fortalecidos y modernizados con lo mejor de siempre y lo mejor de hoy, porque sectores más fuertes se traducen en un PRI más competitivo”.
Muy bien, aplausos de la selecta concurrencia, a la que por supuesto jamás recibí invitación.
Pero en los hechos las cosas se hicieron muy distintas. Los sectores campesino y popular quedaron en manos de dos damas de antier, que ya no representan nada ni a nadie. Mujeres mediáticas, obsesionadas con el lucimiento personal, primero la foto, la pose, la declaración estridente y vacía, luego lo demás. Su desempeño anterior como alcaldesas fue patético y bastante cuestionado, tanto en Calkiní, como en Campeche. Sonia Jacqueline Cuevas Kantún y María Rafaela Santamaría Blum (“María desamparada”), con mucho paralelismo y edad, pero listas para lo que venga y declarar hasta de la muerte del líder de Al Qaeda. De ese tamaño el protagonismo. Aunque ambas son totalmente Palacio.
Con el sector obrero ni meterse porque obedece a otros intereses, y su ya viejo líder puede seguir vegetando, hasta que Dios lo llame a cuentas o en el caso de Campeche el millonario yucateco Ponce, dueño de la industria refresquera venda a otro empresario que quiera hacer de nuevo el agua negra como industria en nuestra ciudad. Porque tontos no son los hermanitos Carrillo Zavala y por algo se alejaron de ella discretamente, saben que obreros, lo que se llama obreros ya no hay, los que no están en las praderas de Manitou escuchando los cuentos colorados de Pancho Puga y “Chanquilón”, están sentados en sus casas comiendo papillas y abrigados para evitar resfríos.
El llamado movimiento territorial sigue formalmente en manos de la inefable Guadalupe de la Candelaria Beltrán, cuya salud ya no le permite ni asomarse a la puerta de su casa. Por su parte la Fundación Colosio prácticamente no existe en Campeche, aunque (el pueblo hable) su presidente mejor conocido como “el jardinero de la avenida Universidad”, sigue siendo uno de los funcionarios más corruptos del Califato (apenas el viernes el Ejecutivo estatal externó algo sobre ello), que lleva más de 10 años sin hacer absolutamente nada en ese organismo del PRI.
En iguales condiciones está la Organización de Mujeres, y se salva el Frente Juvenil con una dirigencia muy combativa que por cierto enfrentó los embates de Alito y llegó a causarle fuertes dolores de cabeza.
Por otra parte, ya vienen los cambios de las dirigencias municipales donde también se pretende seguir el modelo de candidaturas de unidad a pesar de que en cada municipio hay por lo menos cinco aspirantes.
Y la pregunta que se hacen los priistas es ¿con esa estructura y con esas gentes marchará a la guerra “el joven de los dieses”, para conducir el proceso electoral de 2012?
A su tiempo, el PRI tendrá que llamar a sus fieras que por lo pronto se encuentran más enjauladas que las del Circo Atayde.
¿QUIEN MIENTE?
En forma recurrente, se ha venido publicando en los medios de comunicación local, declaraciones de actores políticos donde han señalado que al Estado, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público le ha quitado participaciones, que Campeche ha perdido considerables cantidades; que hay que reformar el sistema de participaciones; que los diputados y el pueblo deben formar un frente común en apoyo al gobierno para modificar la Ley de Coordinación Fiscal; que los campechanos debemos unirnos es esta lucha, etc., etc. Lo anterior de ninguna manera estaría mal, la unidad es piedra angular de cualquier gobierno.
Pero hay que recordar que dicha Ley hace pocos años fue reformada, para favorecer supuestamente al Estado, lo que las gentes comunes y el pueblo no sabemos es si se nos favoreció o se nos perjudicó. Lo que pocos saben es que se desapareció de un plumazo en 2008, el convenio petrolero firmado por el gobierno del estado y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en época de Carlos Salinas de Gortari, signado por Abelardo Carrillo Zavala y que hoy representaría cerca de 800 millones de pesos anuales y que a fines de ese año el gobierno de las piedras demandó mediante una Controversia Constitucional al gobierno Federal por cerca de cuatro mil 600 millones de pesos, que por un mal manejo de los tiempos y lo obsequioso de la Suprema Corte de Justicia de la Nación para con el gobierno Federal se perdió.
Algunos comentaristas de la pluma, han señalado por la insistencia que el gobierno de Fernando Ortega Bernés se ha vuelto puro llanto, queriendo justificar la escasa actividad en inversiones de su administración y la poca capacidad de sus funcionarios para el manejo de los recursos, ya que al menos se deben justificar lo recursos recibidos, que no son pocos; qué no hay una obra importante en la entidad, salvo la inversión federal en carreteras que se están ampliando en el Estado y que esperamos que no se esfumen en el último cuatrimestre de este año, como suele suceder por los subejercicios y los cambios de última hora debido a desastres naturales en otras entidades federativas.
Entendemos que la Secretaría de Hacienda, no le puede quitar por quitar a ningún Estado recursos, que se asignan como participaciones federales por la Ley de Coordinación Fiscal, ya que una cosa significa quitar y otra que se estén reduciendo, desde luego por alguna razón; lo que no sería para todas la entidades federativas. Ahora, que pudieran reducirse por la falta de dinamismo en la actividad económica del país, baja recaudación de impuestos federales, baja recaudación local de predial y agua o por cualquier otro síntoma que pudieran afectar la conformación de la Recaudación Federal Participable, que de manera general afecta a todas las entidades.
Desde luego, si por error Hacienda nos está quitando participaciones, lo justo sería protestar si Campeche está perdiendo y los demás estados no, de ser el caso. Para tal fin, el secretario de Finanzas, Tirso Agustín Rodríguez de la Gala Gómez, debe conocer que existen instancias, como la Comisión Permanente de Funcionarios Fiscales, donde se puede protestar cuando se hacen mal los cálculos en las participaciones federales. Que este carismático encargado de las finanzas estatales señale con claridad, si Campeche está perdiendo o le están quitando, ya que la forma y el fondo son distintos, pero no alberguemos en la población ideas mal sustentadas queriendo justificar algo, o solo por el momento político que se avecina el próximo año.
Lo cierto es que las condiciones económicas del país, no son nada buenas como también nos quieren hacer creer los agoreros del gobierno federal; ellos son los únicos que también quieren justificar con números y estadísticas falsas, que en este país todo está muy bien y que el pueblo disfruta de gran bienestar. Todo es falso, quieren justificar lo injustificable. La vida cada vez resulta más difícil para todos, el dinero cada vez pierde su capacidad real para adquirir alimentos, de que andamos mal, no hay la menor duda, pregunte a la gente de la calle, la que va a los mercados, la que asiste a divertirse modestamente si, efectivamente, todos los miembros de sus familias tienen un trabajo permanente y a las señoras del “mandado” diario si le alcanza para surtir lo necesario para los insumos de su familia. No hay sabios en esto, basta ver que la economía de Campeche se mide por quincenas, fuera de esos días las salas de cine, restaurantes, espectáculos en general están vacíos.
Los chamaquitos del PAN tratan de justificar que esté gobierno tiene menos inflación y más crecimiento en un documento que anda circulando en Internet , lo que resulta falso. La disyuntiva de todo gobierno siempre será o inflación o desempleo y aunque la inflación nos daña a todos, más vale una inflación tolerable pero con empleos y dinero para comprar y comer, que tener muertos de hambre y enormes masas de ejército de reserva en la búsqueda de empleos, donde solo el gobierno federal cree que existen según el IMSS. En este país no se han podido crear en este sexenio 900 mil empleos en un año, sumen y resten lo que dicen las estadísticas, los que se pierden y los que se ganan y verán si hay o no desempleo. El mayor síntoma está en cuántos profesionistas con licenciatura e inclusive con maestrías y hasta doctorados están desempleados en todo México incluyendo Campeche desde luego.
No se nos olvide también que el Sistema de Administración Tributaria (SAT) creado para recaudar, ha sido desde su creación un mal recaudador de impuestos y que en vez de que se incrementen los impuestos más importantes por parte del gobierno federal y los precios de los productos que comercializa; hay que aumentar el padrón de contribuyentes, combatiendo el comercio informal, la venta de productos extranjeros ilegales en el país y otras cuestiones que dañan y afectan el funcionamiento formal de nuestra economía. El IMSS no es ni será el mejor indicador para determinar el crecimiento del empleo.
Están preocupados los políticos de la reforma política; el pueblo no, vaya reforma, reelección de diputados, de alcaldes, etc. Aun, nuestros políticos ciegos y sordos, no comprenden que lo que el pueblo quiere es que hayan menos diputados para bajar la nómina de los congresos, o sea lo caro de organismos como el que administra nuestra democracia el IFE, el IEEC, que a los partidos políticos les demos menos para que realicen sus actividades proselitistas, donde desvían a su favor más de lo que invierten, que desaparezcan fideicomisos que no tiene razón de ser y que se utilice ese dinero del pueblo para el bienestar de pueblo, no de la clase política de este país. Pensamos que nuestros políticos locales y del país, no entienden lo que piensa el pueblo, de una reforma política, cuando lo que ya no queremos son a nuestros actores políticos de siempre, y si la realización de verdaderos cambios que justifiquen nuestros recursos, porque sabemos que todo es una tapadera de unos a otros.
Congresos, gobernadores, presidentes municipales, etc., lo que anda mal es la visión de los vencedores, pero la de los siempre vencidos anda bien; por eso se financian movimientos de lidercillos con recursos nuestros, se les defiende de ser encarcelados o simplemente nos hacemos de la vista gorda, como siempre pasa cuando se trata de un presupuesto público, ¿por qué?, porque de ahí sacan para todo. Por eso no hay dinero y debemos pelear con el otro ladroncillo que se está quedando con la tajada más grande.
Seamos pacientes mexicanos y campechanos, algún día mejoraran las cosas, cuando ustedes se dediquen o decidan a apoyar a nuestros políticos en turno, progresarán como ellos. Para que estén tranquilos, Jaque Mate está recolectando cifras en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para ver cuánto le han quitado al estado de Campeche y cuanto ha perdido realmente, que por favor se den los datos y cifras ciertas, para ver quién miente o quién engaña.
DIAS DE INTERREGNO
Como ya se tenía planeado, el rendimiento de pulso entre Ramón Espínola Toraya y Jorge Luis González Curi, le resulto adverso a éste último, porque su candidato y cuñado Jaime Ruiz Moreno, fue arrasado con solo cuatro votos a su favor contra 11 del “Chavo del 2 por ciento sobre nómina” Rogelio Hoil Canul. Colorín colorado en esta cadena de derrotas que va comenzando a contar “el hermano incómodo”.
Después de esa fecha marcada no se esperaba el Califato que una vez más pudiera perder el control del Consejo Coordinador Empresarial de Campeche, porque Ruiz Moreno representaba los intereses de su cuñado en ese bastión que un día fue plataforma política de lanzamiento del arquitecto para sus aviesos intereses.
Desde días antes la maquinaria se activó por todos lados pero la inducción al voto no funcionó, porque se prefirió a un malo conocido que un peor por conocer y aunque fue una victoria pírrica de Hoil Canul, porque tuvo que ceder espacios a sangre joven que no le permitirá sus viejas triquiñuelas ni manejará esa cúpula empresarial a su libre albedrío, ya que Fernando Sánchez (CMIC), Esperanza Azar Ortega (Canacintra), Rodolfo Divene (agricultores del Centro) y Román Flores (Decam), estarán vigilando muy estrechamente al “Chavo del 2 por ciento” y a su contacto personal Arturo May Maas, responsable de toda esta red de corrupción en el seno del Consejo y con recursos del erario estatal que contravienen la Constitución General de la República.
Por su parte Laureano Ceballos, Yolanda Apolinar Quijano, Luz María Loría Esquivel, se lamen las heridas y lamentan haber quedado afuera de la nueva directiva. El representante vitalicio de Icomos, Ruiz Moreno se encuentra más bravo que un ixtacay. Nunca se imaginó que sus glorias pasadas no reverdecieran aún con el apoyo de su cuñado o tal vez por esa causa. Ahora comenzarán a darse cuenta que cuando el poder se pierde con él se van los triunfos.
Y es de meditarse esta derrota porque a Alberto Zapata Souza, tenía en su poder toda la información un día antes del proceso electoral, precisamente en aquella “cena romántica” en el domicilio del candidato perdedor, pero se la entregó a Apolinar Quijano quien dio “el chaquetazo” con todo y su asesor de cabecera Javier Kantún, pero no supo plantear su proselitismo a favor de Ruiz Moreno y los presidentes de las diversas cámaras la olvidaron el día de la elección. En lugar de ayudar a su planilla la hundió y causó la debacle que era una derrota anunciada pese a la mala imagen de quien resultó vencedor.
Queda en el aire ese dos por ciento sobre nóminas que representa más de 16 millones de pesos anuales que otorga a fondo perdido el Gobierno del Estado a los dos Consejos: Campeche y El Carmen en iguales proporciones, lo que da un monto mayor de 650 mil mensuales para cada uno y que hasta el momento en ninguno de los dos municipios ha tenido una clara transparencia, pese a que de acuerdo a estatutos se “rinde” cada tres meses un informe. Estas reuniones de acuerdo con la ley debe ser con la presencia del gobernador del Estado, pero el que asiste es el Secretario de Sedico, Enrique Ariel Escalante Arceo, individuo protagónico y con aires de grandeza que no corresponden a lo que en ya casi dos años ha realizado al frente de esa secretaría.
En El Carmen José Gordillo Domínguez (Canaco) y sus agremiados deben de estar a la expectativa porque no han externado una sola palabra de todo lo que en Campeche ha ocurrido en los últimos dos años. Eso indica inteligencia, unidad y por supuesto se dividen “honorablemente” esos recursos del dos por ciento sobre nóminas a fondo perdido.
Por el momento el CCEC está pasando un interregno, antes de la toma de posesión de la nueva directiva. Las prebendas de Hoil Canul ¿podrán seguir siendo las mismas o los nuevos miembros de su directiva harán cambiar para beneficio de esa cúpula?
El verdadero vencedor de esta lucha sin duda fue Ramón “El cuaco” Espínola Toraya, quien muestra en estos días una sonrisa de oreja a oreja.
No hay comentarios:
Publicar un comentario