domingo, 4 de agosto de 2013


ELECCION INTERNA DEL PAN

Terminó la parodia, el teatro del absurdo. Los dos candidatos: Eleazar Herrera Vázquez y Yolanda Guadalupe Valladares Valle, el primero representando los intereses de la familia española Mouriño Terrazo y la segunda los proyectos del PRI para “adecuar” candidatos perdedores del proceso electoral del 2015.

El resultado es lo de menos. Treinta y seis votos para la prima de Chano Pérez y veintiuno para el hijo de “Tatay”. Los dos cortados por la misma tijera de los intereses creados. Comprar un partido siempre es fácil si se cuenta con dinero y al parecer lo hay. Treinta y siete votos disputados por consejeros como por ejemplo “La chonita” aquella de la carta a Santa Claus cuando era jefa de la bancada azul en el Congreso, ella y otros más saben por donde masca la iguana. Quince votos de diferencia hablan claramente que las vacas gordas dejaron de pasar por el feudo de “Villa Gely” en Imí III, que vivió 12 años de gloria.

Cuando aún faltan 17 meses del año electoral Yolanda Guadalupe al igual que Mario Pacheco Ceballos, se dejó con$entir con una buena ra$ón. Recordamos que por dinero es capaz de todo (su alma es poder del diablo) hace algún tiempo  Pacheco tumbó a Nelly del Carmen Márquez Zapata como líder de su bancada, luego recibió “los apoyos económicos y otros etcéteras”, al final negoció las concesiones de los taxis y los camiones para su familia. Desde entonces no tiene ninguna posibilidad de moverse con independencia ni de beneficiar al PAN es, sin duda Yolanda la ganadora ideal para el PRI.

Recordamos que cuando aquel autodestape de la Márquez Zapata, quien junto con Valladares Valle y asesoradas por el hermano de ésta Carlos Valladares (firmante de aquella cartita dirigida a Carlos Mouriño Atanes), aparentemente acaban con esta “victoria” de iniciar una revancha largamente esperada y que mejor que con todos los gastos pagados.

La realidad hoy es otra, su odio enfermizo contra los españoles y en especial contra doña Gely, porque no apoyó a ninguna de las dos para la gubernatura en el 2009, las llevó a lo que hacen mejor: traicionar. Y vendieron ---como en esta ocasión---, la candidatura de Mario Alberto Avila Lizarraga y la de José del Carmen Rodríguez Vera para la alcaldía de El Carmen. Con el tiempo “Satanás” podrá desgranar en sus memorias todos los detalles. No hay peor cuña que la del mismo palo.

Parece que el “vicegobernador” tiene prisa y el “madruguete”, para desalentar a otros candidatos, lo adelantó al más puro estilo priista, solo que del plato a la boca…Los procesos ya no serán como en el nefasto docenato panista. Hoy el gran dedo, la cargada y toda su parafernalia son propiedad de Los Pinos. Las encuestas a Camacho y su CEN le sirven lo mismo que el papel sanitario.


EL MIERCOLES, EL RITUAL

El próximo miércoles 7 de agosto se cumple el ritual y el gobernador del Estado Fernando Eutimio Ortega Bernés, rendirá su IV Informe de Gobierno que ahora exhorta a buscar el desarrollo. Si bien es cierto que los cuatro años se cumplen hasta el próximo 16 de septiembre, la Constitución Política de Campeche lo obliga a presentar en este día el estado que guarda el ejercicio de su labor administrativa.
Escribir sobre política y poder es como vivir en el norte del país en estos tiempos o en el mejor de los casos estar en medio de un tiroteo entre el Ejercito y los narcos.

Nunca sabe uno lo que le espera y difícilmente va a quedar bien con todas y cada una de las partes. Hay ciertamente un despropósito, en el empeño de escribir la historia de un pasado tan inmediato, sobre todo porque es un pasado que casi se puede recordar como parte de nuestra vida. Pero ¿qué somos los periodistas sino no historiadores de lo inmediato, biógrafos equivocados del poder?

A manera de referencia los campechanos habremos de recordar que estas fechas están cinceladas desde hace más de 156 años. Tiempo que paradójicamente se inició un 1º de junio de 1867 luego de 160 días de sitio y a las dos de la mañana de esa fecha, las fuerza liberales sitiadoras, al mando del general Pedro Celestino Brito, escalaron las hoy reparadas murallas de la ciudad de Campeche, dando fin a la guerra contra el efímero imperio de Maximiliano de Habsburgo, en el Estado de Campeche.

La voz popular encontró en ese entonces al señor José Morales, de haber vendido la plaza a las fuerzas liberales y aún bautizó esa fecha histórica con el apodo del señor Morales. “Cacahuate”. Para los campechanos del Siglo XIX el primero de junio es “San Cacahuate”, origen de nuestra emancipación política y se festejaba en Campeche con toda solemnidad. La ciudad vivía esas remembranzas de los hechos épicos contra las fuerzas imperialistas.

Morales, tenía una nevería llamada “El Polo Norte”, es decir pasado a tiempos actuales es señalar “Mar Azul”, “Acapulquito” “El sombrerón”, sitios donde el carrillismo, el califato (incluido el azariato) tienen todavía sus últimos reductos en reuniones para tratar de rescatar lo que día a día se va perdiendo ante los gobiernos de cambios. Morales tenía una ligereza de lengua equiparable a la de algunos conductores actuales de la televisión local.

Pero volviendo a “San Cacahuate” es recordatorio de la toma de la ciudad en ese día por Pablo García Montilla, que entró a la plaza en medio del júbilo popular. Es de facto el antecedente más remoto de lo que el primer gobernador de Campeche hizo para darnos emancipación política.

En estas fechas en el pasado reciente se han dado choques como el ocurrido entre Eduardo Lavalle Urbina, quien rompe con su antecesor Héctor Pérez Martínez sin pensar que éste sería acomodado con secretario de Gobernación en el viejo palacio de los Covián en el D.F. Los asuntos de Campeche comenzaron a marchar en cámara lenta, porque las relaciones se habían congelado. Tal vez por esas circunstancias políticas los informes de Pérez Martínez siempre tuvieron presencia de campechanos significativos en la política nacional.

Otro caso de esas fechas. El militar José Ortiz (Córdova) Avila, en uno de esos días previos a comparecer ante el pueblo había metido a la cárcel a su propia esposa Consuelo Ibarra de Ortiz, quien en un arranque de celos había abofeteado en Hecelchakán a una mestiza que se decía era amante de su marido. Solo fueron unas horas pero bastaron para bajarle los humos a su consorte.

En el primer informe de “La Nueva Manera” se dio un rompimiento de Jorge Salomón Azar García con su antecesor Abelardo Carrillo Zavala, debido a unos adeudos que éste había dejado y que aparentemente se habían cubierto por parte del cetemista. Este último tomó una actitud como afrenta y junto con sus amigos obreros y colaboradores comenzando con Pancho Puga y Chanquilón, abandonaron el recinto oficial que fue la Plaza de la República, hoy hecha un desastre por culpa de Bety Selem.

Los dos siguientes gobiernos pese a que el segundo del califato su titular tenía, y sigue teniendo la mecha corta, no se dio ningún rompimiento con su antecesor, aunque justo es reconocerlo Azar había cumplido las reglas no escritas de los ex gobernadores que señalaban no vivir en el Estado, no opinar de política y no meterse en camisa de once varas.

El miércoles se verá y medirá el aplausómetro en el Domo del Mar de Ciudad del Carmen, en especial entre los ex gobernadores, pero en forma significativa entre Rafael Alejandro Moreno Cárdenas, Raúl Aarón Pozos Lanz y Ana Martha Escalante Castillo, diputados federal, senador y alcaldesa de Campeche, respectivamente. Un buen termómetro político a 12 meses del año pre electoral.

Pero conociendo a Enrique Iván González López, es posible que ya haya preparado a sus lideresas para hacer proselitismo y que se piense que él también está en la jugada para el 2015.

Ortega Bernés, buscará definir lo que serán los 24 meses que cerrarán su administración. Lo positivo de su gobierno será desgranado sin protagonismo, sin pensar en su popularidad ya que a estas alturas el prometer es presente.

Hay un rubro que sigue ensombreciendo las finanzas y es el de los gastos de publicidad de imagen o de apoyos a medios. Ese rubro es una asignatura pendiente que le fue heredado de 12 años de Califato y que como el sueño de Ibargúengoitia, al despertar el dinosaurio sigue aquí.

En el protocolo de las obras faraónicas o de relumbrón, que no se ven pero con certeza ahí están en la figura de hospitales, escuelas, etc. Que sin alharaca son ciertas y visibles en toda la geografía estatal. Educación, Salud y Desarrollo Social son su mejor bandera.

Las obras de gran relieve no las verá terminadas el actual gobernador como son las de infraestructura portuaria y carretera. Por otra parte la situación económica no tiene tendencia a mejorar por el contrario los indicadores económicos son pesimistas en cuanto a los años por venir.

Pero es preferible hablar con la verdad y no como nos hizo a los campechanos el anterior gobernador cuando en sus informes de gobierno habló de obras faraónicas que se quedaron en las piedras.

Fernando, utilizará el miércoles su mejor arma: su verbo, su lenguaje sin diatriba y sin escatimar alabanzas cuando estas se dan. En los anteriores informes nunca mencionó a sus antecesores ni se quejó de trato alguno que haya incidido en el buen desempeño de su administración. Es un hombre de un si inicial basado en pronunciamientos, reglas, objetivos, aspiraciones, etc., aceptados por todos.

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