“¿Cómo cambiar el futuro si no entendemos el presente?”
LA NECESARIA UNIDAD
Por más hábil que
un gobernante sea, el destino de su administración depende en gran medida de
sus más cercanos colaboradores. Las designaciones equivocadas, sobre todo en
los puestos clave, son siempre el primer paso en falso de un nuevo gobierno.
Por fortuna, la administración pública ha crecido desmesuradamente, pero hay
cargos que son vitales para el éxito del
gobierno.
“Alito” no se
equivocó. Para el segundo cargo político en importancia escogió a una persona
con gran experiencia y talentosa que si bien es cierto no lo reclutó durante su
campaña, pero fue observado y tiene en su currícula ser sobrino de uno de los
más talentosos y verticales políticos campechanos, porque Dn. Pablo González
Lastra dejó huella en más de dos sexenios.
También por el
contrario logró añadir a su círculo más cercano a un joven que le está dando
magníficos resultados y, que a su vez, es nieto de un viejo alcalde de la
capital de Campeche y que fue un empresario de talento.
Hace poco más de cuatro meses hay un
nuevo gobernador del Estado. Quedaron atrás los latrocinios y la corrupción que
permeó hacia los más bajos estratos de la vida económica, política y social de
Campeche. A estas alturas todo le queremos cargar a un joven con un dinamismo
inusitado. Ni Rafael
“El Chel” Rodríguez Barrera, que también frisaba los 40 años tuvo
tal arranque y movilidad política que no se resume al Estado, sino que visita
con mucha frecuencia al jefe mayor de Los Pinos.
Rafael Alejandro Moreno Cárdenas,
está rompiendo paradigmas, el género político en materia de gestión. No es para
menos, Campeche está materialmente saqueado por un gobierno que dejó hacer y
dejó pasar sin un límite. En el pasado se decía que el mejor gobierno federal
que tuvo México el siglo XX fue el de Miguel Alemán Valdez, porque “todos robaron y
todos se fueron locos de contento”.
Pero enderezar ese barco es sumamente
difícil, porque las condiciones de México están colapsadas por el hundimiento
de los precios del petróleo (que Campeche encabezaba como máximo productor), la
devaluación del peso en función del dólar americano y el aumento de la deuda
pública que no deja respirar las finanzas nacionales. Con eso no se juega.
Salir de nuestros problemas requiere más que inteligencia y dinamismo. La deuda
del país creció 10.5 puntos porcentruales colocándose en el 44.9 por ciento lo
que supera las deudas que acumularon en su momento Ernesto Zedillo, Vicente Fox y Felipe
Calderón. Lo que no se entiende es a quién o quiénes vende Agustín Carstens, el robusto jefe
del Banxico, 200 MDD diarios.
Y es precisamente ahí donde está la
llave de este problema. Campeche, nunca recibió en justicia apoyo del gobierno
federal por su aportación a las finanzas nacionales. Hoy, ya es muy tarde para
llorar al muerto y demasiado temprano para pensar que una reforma energética
sea nuestra solución.
Mientras las llaves de la alacena estén
en poder de otros nuestras posibilidades son mínimas y, que la justicia –pese a
la innegable amistad del Presidente de la República con “Alito”--, no nos
llegará como las lluvias, que un pueblo solo puede ser invencible si está
unido, si cobra conciencia de que de esa forma podremos aspirar a mejores
estadios de bienestar. Solo unidos llegaremos a nuestra meta. Si seguimos
agarrados de las greñas y haciendo honor al cuento de los cangrejos, no habrá
crecimiento en grande.
Y en esta breve reflexión habremos de
considerar que el principal problema de Campeche es el económico. La falta de
inversión, el desempleo que aumenta pese a una juventud cada vez más preparada,
esta generación que cada día son más dueños de nuestra tierra, pero que
lamentablemente no tenemos con que emplear esa mano de obra calificada o no,
pero con suficiente energía como la del titular del Ejecutivo estatal, para
cambiar destinos.
Y en este grupo de desempleados existen
también miles de campechanos que han rebasado los 40 años, pero su fuerza de
trabajo y cierta experiencia los hacen adecuados para laborar.
Desafortunadamente este gobierno cuyo lema es de “Crecer en grande”, no puede
seguir creando dependencias y con ello aumentando el gasto corriente, so pena
de caer en el bache del inmovilismo al no haber obras ni inversiones.
Y es en esta obra pública donde hay
planeación. Pero hay que recordar que Jorge Carlos Hurtado Valdez y Fernando Ortega Bernés, saludaron con sombrero
ajeno con obras federales que llevaron incluso a plasmarlas en sus informes de
gobierno.
Pero el mayor reto de “Alito” será el
crear empleos para corregir esos desequilibrios heredados. Campeche no podrá
despegar como lo han hecho otras entidades del país mientras no haya generación
de más y mejores empleos. Con Moreno Cárdenas se están sentando las bases
tal vez no al ritmo con que se quisiera pero el paso firme se está dando.
Sabemos, por experiencias pasadas, que
el desarrollo no se consigue con dádivas y limosnas, sino con la creación de
más y mejores empleos, que cada campechano tenga la oportunidad de un trabajo
productivo y bien remunerado. A ello se le debe agregar que se debe persistir en
el combate a la corrupción que fue el talón de Aquiles del anterior gobierno y
que la ciudadanía espera que ya los primeros peces gordos estén a buen recaudo.
Solo así se logrará aquel lema de “cuando veas las barbas de tus vecinos cortar,
pon las tuyas a remojar”, porque hay todavía en la administración pública federal,
estatal y municipales muchos peces gordos. Todos esperamos ese golpe de timón
para poner a buen recaudo a auténticos pillos como Enrique Iván González López, Fernando Sadek Abad, David
Uribe Haydar, Roberto Sarmiento Urbina,
Alfonso Cobos Toledo, Miguel Duarte, Carlos Vidal Angles, José Farías Maldonado
y un largo etcétera.
Ahora bien, es la sociedad civil la que
debe organizarse y apoyar a su gobernante para ir, no detrás de él, sino a su
lado. Participar y luchar contra la injusticia federal. Cámaras empresariales,
organismos no gubernamentales, asociaciones en general que siguen bastante
pasivos en los últimos años para empezar a hablar –y no solo para cobrar lo que
les deben--, y alzar la voz ante la opinión pública, porque hace mucho que esto
no se ve y es debido a esta pasividad lo que observan los que nos califican
como un pueblo que no se queja. El mejor ejemplo es el Consejo Coordinador
Empresarial que estuvo maniatado por una señora durante el pasado sexenio y que
solo habló bien porque le fue como en feria (a ella en lo personal). Hay que
recordar las sabias palabras del prócer de la democracia Francisco Indalecio Madero: “El
éxito no es obra del azar, sino del esfuerzo”.
La opinión pública con ese arranque
inusitado está a favor del gobernador. Los rudos del PRI y toda una red de
complicidades de provechos ilegítimos se encuentran en estado de alerta y
muchos traidores han sido desemascarados y otros más están más quietos que un
muerto. Todavía hay muchos agazapados, materialmente escondidos en las nóminas
del gobierno estatal y los once municipios.
Por lo pronto, no queda sino aplaudir
la vocación de orden moral que anima al gobernador a actuar. Y que la
ciudadanía no quiere en el cuarto piso (¿ya se terminó de arreglar y se
exorcizó de los malos espíritus?), un héroe sacrificado por los demonios que de
ahí salieron. Que no se olvide que los campechanos quieren un gobernante que
actúe de acuerdo a valores y que sabemos que tiene en mente, cuáles son los
medios adecuados para alcanzar sus proyectos.
En este escenario tendrá “Alito” que
navegar hacia la consolidación de su gobierno con sus propios proyectos
políticos, a los que no debe permitir que nadie les meta mano, incluso ni los
poderes fácticos. El poder nunca se comparte y eso lo sabe bien este joven.
UNAS PERLITAS…
De que las perras son
bravas, hasta los de casa muerden. Viene al caso por el pleito que se traen
Yolanda Guadalupe Valladares Valle e Ileana Janette Herrera Pérez. Asústense
son tía y sobrina y que aunque los apellidos no dicen nada, las dos tienen sus
orígenes en Sihochac. Hoy andan a la greña por así convenir a sus intereses.
La Delegación del
Instituto Mexicano del Seguro Social a cuyo frente estuvo hasta esta semana el
que durante 12 largos años manejó las finanzas de los gobiernos de Antonio
González Curi y Jorge Carlos Hurtado Valdez, Víctor Santiago Pérez Aguilar,
llegó a su fin. Fue bueno para los debe y haber, pero en materia de servicios
de salud para el derecho habiente fue otra cosa. Ahí se cometieron innumerables
anomaíías en materia de negligencia médica que nunca fueron solucionadas. Las
quejas menudearon, la sordera administrativa para escuchar a los afectados fue
perenne. El maltrato cobró vigencia de derecho y la insuficiencia de equipo y
personal médico es de antonomasia. Llega a suplirlo Rafael Rodríguez
Cabrera, hijo del ex gobernador de
Campeche, Rafael Rodríguez Barrera.
Al parecer está en
la cuerda floja el delegado de la SEMARNAT, Enrique Pérez Gómez. Quien ha
soportado las quejas por el abandono de nuestra riqueza forestal entre las que
destacan la zona de Calakmul y los manglares de Campeche, donde se ha cometido
violaciones a la naturaleza y se le acusa de moches, mordidas y comisiones.
Digno sucesor de Enrique Iván que dejó una cauda de hurtos. Su relevo podría
ser cosa de días.
LAVARSE LAS MANOS
EN AGUA SUCIA
La hoy ASE encubre
las transas y felonías de Garo en el Congreso, desde donde se catapultó e hizo
pagos onerosos en su proyección al cargo de presidente municipal que hoy ocupa
por orden de su ex jefe, amigo y cómplice “Fer” Ortega Bernés.
La vida es como es. Nada existe por
encima de las contradicciones del hombre. La política es el equilibrio permanente
en el cambio incesante, tarea de hombres apasionados y falibles.
La política es también la vida en el
burdel y nadie que se sepa busca la castidad en un casa de citas. Quienes durante largos años aprendimos a
entender la necesidad de ser veraces como urgencia y requisito profesional, no aprendimos
solo eso, por supuesto, sino sobre todo que el periodismo sólo se puede ejercer
con independencia y al servicio de la curiosidad.
Muchos “amigos” cuando platican conmigo
me buscan tranquilizar cuando indago de sucesos, pregunto nombres y acciones.
Me doy por enterado que no desean que se sepa lo que no se puede decir. No
preguntes, no averigües, no insistas. Pero yo siempre seguire mi línea trazada:
preguntar a la realidad y a vivir, con pasión, el trabajo que hace tres lustros
hacía todos los días y hoy casi en el retiro los domingos.
Un breve paréntesis de cuatro meses marcado
por las circunstancias de haberse adelantado en el camino mi hermano menor Carlos Javier,
que me dejo sumido en los recuerdos. Hoy, retomo el ya largo camino andado con
pasión. Que pronto se hace tarde, como diría Fernando Savater.
Hoy ha puesto sus barbas a remojar el alcalde
de Campeche y anterior presidente de la Junta de Gobierno y Administración del
Congreso del Estado, Edgar Román Hernández Hernández. Hoy que se ve
cercano el cambio de titular de la Auditoría Superior del Estado (ASE), Jorge Martín
Pacheco Pérez.
El Auditor Superior del Estado ha
venido esforzándose por tapar con maquillaje las rapacerías, dispendios,
derroches, tráfico de influencias y una serie de pagos hechos por el Congreso
del Estado cuando lo presidió el hoy primer edil de Campeche, Hernández Hernández.
Edgar, de su parte, se ha propuesto
encubrir todas las anomalías, llámense desvíos de fondos públicos de los
presupuestos anuales del Ayuntamiento, que dejaron su antecesora alcaldesa, Ana Martha
Escalante Castillo y quien fungió como su Secretario del
Ayuntamiento, Carlos
Moreno Hernández, cuya mansión construida en el lapso del trienio ya
es un secreto a voces, lo mismo que sus parciales complicidades en escándalos
como el de la invasión de Hobomó y otras muchas, donde operó en contra de los
intereses y los derechos de esa comunidad y favoreció a particulares, como en el
caso también de las colonias El Mirador, Diana Laura y Luis Donaldo Colosio,
donde otro vival, supuesto primo de la hoy diputada, ex lideresa estatal del
PRI y traidora de ese partido, Ana Graciela Crisanty Villarino, quien gozó de
la protección de Moreno Hernández y de su complicidad al darle validez
incierta a la dudosa escritura que Ricardo Ramón Crisanty Gómez, presentó al
Ayuntamiento, asegurando ser el dueño de 12 hectáreas; cuando las familias de
esas colonias las llevan habitando alrededor de 40 años desde la época en que
esos predios pertenecían y originalmente son de la Nación.
Meses antes de que Hernández Hernández abandonara
la diputación del IV distrito por el que llegó con el voto popular y su
suplente, Alejandrina
Moreno Barona se negara a acudir a cubrir su suplencia, mostró su
desprecio por la ley, ya que con la protección y predilección que le distinguía
su entonces jefe, Fernando Ortega Bernés, incumplió su período
trianual de diputada y debió entonces ser presentada por el Ministerio Público
del fuero común, pero quien la sucedió y terminó la presidencia de la Gran
Comisión, Ramón
Ochoa Peña, no denunció el abandono de dicha diputación, como debió
de haber hecho ante el Ministerio Público, porque el entonces carmelita llegó y
la suplió espuriamente en la presidencia de la Junta de Gobierno y en la
coordinación del grupo parlamentario del PRI, Ochoa Peña, pensaba que sería
incluido en el actual gabinete estatal y le darían de nuevo la Secretaría de
Pesca. Pero se equivocó. Rafael Alejandro no es Fernando Eutimio.
De no haber tenido esa esperanza quizá Ochoa Peña
hubiese dado parte al Ministerio Público para que este, a petición del Congreso
obligara, ya sea a Hernández Hernández o a Moreno Barona, para que retornara uno a terminar con los tres años de
su diputación y/o acudiera al Congreso a hacerlo su suplente, pero ninguno de
los dos lo hizo y la ilegalidad permeó hasta el fin del trienio y aún perdura.
Según lo que ha trascendido y podido
averiguarse, las revisiones a las cuentas del Congreso en el período en que lo
presidió “Garo”
Hernández, han revelado una serie de pagos estratosféricos
realizados por el hoy presidente municipal de Campeche, a numerosos grupos de
“líderes”, que recibieron a manos llenas de “Garo” quien así ya se venía
proyectando por órdenes del cuarto piso como candidato a la presidencia
municipal de Campeche que hoy ostenta.
Los pagos “bajo el agua” hechos por Hernández
a numerosas personas a modo de coacción sutil para que no le pusieran
obstáculos a su camino a la presidencia municipal de Campeche, son realmente
millonarios.
Llama la atención y con razón se le
veía acudir cada quincena a la caja del Congreso, el oneroso pago de cientos de
miles de pesos que le hacían a comunicadores, articulistas de diversos medios,
donde se dedican a difamar o a alabar, según sus acuerdos, pero en el
pasado durante el sexenio de “El tapir”
se hizo pública una lista con los nombres de más de 70 periodistas que recibían
sus pagos quincenales a través de la Unidad de Comunicación Social del Gobierno
del Estado durante ese gobierno de José Antonio González Curi.
Hoy durante toda la estancia del “Garo”
Hernández en la presidencia de la Junta de Gobierno del Congreso, muchos recibieron
de “El Garo”,
cantidades enormes que no se justificaban, pero lo citamos porque es un botón
que muestra perfectamente que, como esos ejemplos hay decenas y decenas de
aviadores, así como parientes y amigos que dejó “El Garo” en el Congreso como
herencia maldita y que le han hecho la vida de cuadritos a Ramón Méndez Lanz.
Nada más que al llegar el actual
presidente de la Junta de Gobierno del Congreso, Ramón Méndez Lanz, este ha dicho
que no solapará desvíos que se han operado en el pasado inmediato de la
presidencia que lo antecedió.
Hasta el mes pasado “El Garo”,
se dice, estaba tranquilo, pero que al saber de la visita del titular nacional
de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), José Antonio Meade Kuribeña y
que entre su agenda se encontraba la sustitución del hoy ex delegado de la
Sedesol en Campeche, Carlos Oznerol Pacheco Castro, todo cambió y
anda temeroso de que la guillotina le llegue aun siendo presidente municipal y
se tenga que pedir inicio de procedencia de juicio político contra el alcalde
capitalino.
Pacheco Castro, quien por cierto también
tiene cuentas pendientes con la justicia y con la moral, pues su ex
guardaespaldas supuestamente asesinó a una adolescente y éste declaró en el
Juzgado Penal que el arma con que cometió el crimen se la compró el
Ayuntamiento de Campeche para cuidar al entonces alcalde Pacheco Castro, y que el no cometió
el homicidio, aunque si andaba libando con el ex alcalde y el hasta el viernes
15 de enero del 2016, delegado de esa dependencia federal.
Hoy, el presunto criminal, Danilo
Echeverría Pereyra, anda libre por la influencia de su ex jefe que
manipuló la reclasificación del delito a “homicidio en riña”, lo que le valió
la presidencia del Tribunal Superior de Justicia a la autora de dicho cambio.
Resulta que Pacheco Castro fue quien desde
su época como presidente del Congreso, impuso como titular de la ASE, a su
primo, Jorge
Martín Pacheco Pérez, por lo que con el despido de su primo de la
Sedesol, también el hoy Auditor Superior del Estado, será removido en breve o
en un tiempo no muy lejano.
De ahí que el hoy alcalde, sienta que
le han retirado la cobija del proteccionismo y todas las triquiñuelas que hizo
en el Congreso, saldrán a relucir más pronto que tarde y sería uno de los
considerados chivos expiatorios que serían sacrificados, en este sexenio; pese
a que no encajarían precisamente en el término “chivo expiatorio”, pues estos
son inocentes, ya que los que están en la mira de la virtual Fiscalía
Anticorrupción, están bien definidos.
Pacheco Castro
dejó una dependenica federal materialmente saqueada con un
grado enorme de corrupción. Bien haría Christian Castro Bello, en seguir hasta sus últimas consecuencias todo ese saqueo de más
de tres años. Sin embargo fuentes consultadas por Jaque Mate, señalan que entre
los pillos se encuentran Xavier Carrillo Olivares y una tal Beatriz
(Recursos Humanos), quienes mantenían además una relación amorosa, Jorge Sansores,
Angel Dey Noh y otros más que daremos a
conocer próximamente y que fueron sus alfiles justamente en su paso por el
cuartel Pedro Baranda.
Por lo pronto, los posibles futuros
inquilinos de San Francisco Kobén, son, además de “El Garo” Hernández: los ex
alcaldes de Escárcega, Fernando Caballero Buenfil, quien se mudó de
Escárcega a Campeche; el ex primer edil de Carmen, Enrique Iván González López,
quien se anda escondiendo hasta de su sombra en su propia ciudad, y los también
ya mencionados, ex titulares de la APICAM y de la Sepesca ambos, David Uribe
Haydar y Fernando Sadek Abad, este cuyo hijo presumió
un equipo sofisticado de luz y sonido cuyo costo, según los que saben, oscila
en los dos millones de dólares, mientras que el primero es hijo del cacique de
Champotón y es ahí donde está esperando la acción de la justicia.
De su parte, el hoy titular de la ASE
ha estado protegiendo las transas de “El Garo” en el Congreso, Jorge Pacheco Pérez, quien ha
navegado en el cargo más de tres lustros y rodeado de alrededor de 100
“auditores” que cobran religiosamente onerosos sueldos pero que nunca han
aplicado la ley contra los corruptos y los actos de corrupción que siempre
detectan en las “revisiones” anuales que hacen de las Cuentas Públicas de los
Ayuntamientos y del Gobierno del Estado. Esperemos a ver qué sucede. Esto
apenas comienza.
¿Y LA TIMBOMBA AMA’?
De lengua me como
dos platos, decía el poeta del crucero.
Dicen los enamorados por aquello del 14
de Febrero que se avecina que “no prometas cosas que no vas a cumplir, pues lo
único que logras es destrozar la ilusión de alguien que cree en ti”, dicho que
aplicable a la política y para poca fortuna de los que aquí vivimos,
históricamente nos deja innumerables reflexiones acerca de las administraciones
municipales de las que se tienen registro, puesto que todas sin excepcion
alguna, han dejado en entredicho el manejo de los recursos públicos sobre cada
ejercicio presupuestario que les ha sido asignado puntualmente.
Pues bien, hace semanas se hizo pública
una situación en particular de las muchas que seguramente irán apareciendo
conforme pasen los días y meses y que para poca fortuna de los involucrados siempre
quedan documentadas como el siguiente caso que nos remonta al día 26 de Abril
del año 2013, fecha en la cual la Secretaría de Administración e Innovación
Gubernamental, notificó al Ayuntamiento de Campeche que su solicitud sobre la
fracción del predio ubicado en la Avenida Solidaridad Nacional número 1-A, por
Avenida Pedro Sainz de Baranda del Sector Solidaridad Nacional de esta Ciudad,
con una superficie de 7,508.08 m2 había quedado aprobada a favor del Municipio para
la supuesta realización de un proyecto de cultura en ese entonces bautizado
como el “Museo del Niño La Timbomba”.
Cuentan que para ello también el
Municipio entregó en comodato, a capricho del Gobierno del Estado bajo el
argumento que requerían en sustitución del espacio dado anteriormente, uno de
similares condiciones para el resguardo de su parque vehicular ¿Cuál parque
vehicular pregunto yo si siempre se los roban?, el predio ubicado en la Antigua
Carretera a Hampolol sin número de la Colonia Solidaridad Nacional de esta
Ciudad, con número de cuenta U-11986 y Clave Catastral 0200111030200020000000,
inscrito precisamente en el Registro Público de la Propiedad y del Comercio del
Estado de Campeche a fojas 190 a 191, Tomo III-B, Inscripción II y bajo el número
19200, mismo que se acabó desincorporando, para todos los efectos anteriores,
de su patrimonio el citado Ayuntamiento el día 30 de Mayo del 2014.
Pues bien, con motivo de lo anterior,
se facultó nos cuentan, como todas las cosas que se llevaron a cabo en el
trienio anterior, al manejo discrecional de la Directora de Administración y
Calidad del Municipio de Campeche, Lydia Elena Berrón Osorno. En razón de ello, documentado
públicamente está también que Conaculta le autorizó al Municipio de Campeche la
cantidad de $12’000,000.00 (doce millones de pesos 00/100 M.N.) para la
construcción del citado “Museo del Niño La Timbomba”, de los cuales según relató
la propia Maria Eugenia Araizaga Caloca,
Directora General de Conaculta, del anticipo de $3’450,241.00 (tres millones cuatrocientos
cincuenta mil doscientos cuarenta y uno pesos 05/100 M.N.) empleados
supuestamente para la cimentación e instalación sanitaria que invariablemente
no se aprecian en la “obra negra” a la vista de todos los vecinos que meses
atrás han denunciado esta irregularidad, la administración que presidio Ana Martha
Escalante Castillo únicamente comprobó, a través del encargado de la
obra, un tal Arq.
Rubén Eduardo Silva Ballote, la cantidad de $947,335.00 (novecientos
cuarenta y siete mil trescientos treinta y cinco pesos 00/100 M.N.), quedando
en el “limbo” o vaya usted a saber en la “maleta” de quién como dijera en su
tiempo Carlos
Ernesto Rosado Ruelas, la cantidad de $2’502,906.05 (dos millones
quinientos dos mil novecientos seis pesos 05/100 M.N.), situación que dejó al
Municipio de Campeche en proceso legal ante la Dirección General Jurídica de
dicha Conaculta por el proyecto número 0022013. ¡Hágame usted el favor!
Bien haría la Contraloría Municipal en
citar tanto a Berrón
Osorno como al “brillante” Secretario de Coordinación y Planeación, César Antonio
Narváez Samuel (quien por cierto nos cuentan que ya despacha en la delegación de la Sedatu), así como también valdría
la pena cuestionarle al “Garo” Hernández si su Cabildo actual hizo
bien en ratificar a la actual titular de la Dirección Jurídica ante tales y
evidentes conflictos de intereses al estar al frente de la misma dependencia en
el trienio que salió.
Por si fuera poco, las cosas no paran
ahí y esa no es la única denuncia de la que tiene conocimiento Jaque Mate
en estas largas y tendidas vacaciones que hoy damos por concluidas, pues
resulta que justamente una semana antes de la toma de posesión de “El Garo”,
el entonces Secretario de la Comuna, Carlos Román Moreno Hernández, autorizó a
través de la Dirección de Servicios Públicos, la expedición de constancias de
propiedad en diversos panteones de la Ciudad a gente afin a esa administración
y dentro de las cuales según consta en el acta 334/2015 en poder de Jaque Mate
y que en este blog se exhibe, se expide una de ellas a favor de quien en ese
momento se desempeñaba al frente de la Dirección de Gobierno Ciudadano, hoy
bautizada nuevamente como Atención y Participación Ciudadana, Carlos Enrique
Estrella Estrella y quien fuera tambíen suplente de Ana Martha Escalante Castillo durante su paso
por el Congreso del Estado. Juzgue usted y saque sus conclusiones, de lo que no
le quede duda es que estamos de regreso amable lector.
Apreciados
lectores de esta hebdomadaria columna, estaremos con ustedes semanalmente a
partir de esta fecha. Que disfruten las fiestas del Carnaval que dieron inicio
la semana anterior, que tiempo habrá para darles a conocer muchas
investigaciones de nuestro acontecer político.
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