martes, 9 de enero de 2018
“Campeche ha gozado el privilegio de ser
crisol de personalidades que en la ciencia, el arte, la política y otras
manifestaciones positivas han puesto muy en alto su nombre y su linaje”.
Lic. Carlos Pérez Cámara.
CON UN CHIP SIN SILICIO
No es el político
tradicional, viene del sector privado, su familia y formación es de ese sector
sin dejar de estar enterado del devenir político de su entidad porque es nieto
por la vía materna de un ex alcalde campechano muy apreciado por ser un hombre de
la cultura del esfuerzo; un ser con esa campechanía que siempre lo distinguió.
Altruista siempre y que no le gustaba la publicidad personal, me refiero a Leovigildo Gómez
Hernández, quien estuvo al frente del Ayuntamiento de la hoy ciudad
de San Francisco de Campeche.
Claudio
Cetina Gómez, es un joven inteligente
de un verbo convincente y de un razonamiento deductivo verdadero, cuyo arribo a
la política fue a través de su amigo el hoy gobernador del Estado, Rafael Alejandro
Moreno Cárdenas, y que demostró su capacidad durante los agobiantes
días de campaña del hoy ejecutivo estatal.
Se hizo de la entera
confianza de Moreno
Cárdenas a pesar de que no era de sus amigos más cercanos antes de
la actual administración. Tal vez por ello su desempeño desde un inicio fue
encargarle encomiendas cada vez más importantes que las fue cumpliendo con el
beneplácito de su jefe.
Hoy es prácticamente un
fuerte candidato in pectore a ese sitio donde estuvo su abuelo materno hace casi 60 años (1956-58), esfuerzo que le ha permitido
posicionarse por medio de la promoción de su gestión y trabajo como el
personaje más reconocible del gabinete por su peculiar frase del chip,
esa minúscula placa de silicio que equipara con sus entrevistados como un
cambio de mentalidad para el trabajo cotidiano.
En esta ocasión su labor
ha hecho que miles de campechanos ya lo identifiquen como integrante de un
gobierno echado para adelante y con nuevas ideas para beneficio de la
ciudadanía.
“Viluch”,
como cariñosamente conocían a su abuelo los campechanos del siglo pasado
estaría de plácemes porque su nieto encarna al igual que él, su amor por la
política y por servir a sus conciudadanos.
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